La misma fue concebida para captar las aguas residuales de 4.000 viviendas, pero actualmente recibe los productos de unos 20.000 usuarios, según informó el mismo titular de la empresa aguatera, arquitecto Ludovico Sarubbi.
El titular del ente precisó que hace décadas solo se tenían casas en esta ciudad del Área Metropolitana de Asunción, pero que la misma es actualmente asiento de numerosas fábricas, moteles y otras firmas de gran envergadura.
“Esta planta de tratamiento, en las condiciones actuales, ya no da abasto. Y eso implica que hay situación de emergencia en San Lorenzo. Los efluentes cloacales empiezan a retroceder y van a empezar a explotar en calles y residencias si no se toman las medidas para ampliar la planta”, advirtió el profesional.
Incluso señaló que existen personas que indicaron que, en jornadas de lluvia, las aguas negras ya salen en piezas, patios y arterias, generando nauseabundos olores.
URGENCIA. En otro momento, el titular de Essap explicó que ya tienen concluido el diseño para materializar esta planta de tratamiento.
Aclaró que el trabajo debía ser entregado en junio del 2014 pero debido a la urgencia se decidió adelantar el proceso para que ese paso sea dado en enero, y a fines de ese mismo mes ya se pueda llamar a licitación de su construcción.
“Es grave lo que pasa. Para paliar los efectos contratamos una empresa que limpiará y retirará los efluentes de la planta de San Lorenzo. Vamos a hacer un baipás para llevar todos los residuos cloacales a la segunda laguna que hay en el lugar, y cuando se seque en 10 o 15 días, trasladaremos todo a Viñas Cué para que sean enterrados”, apuntó.
Sarubbi dijo que para ello cuentan con la autorización de la Secretaría del Ambiente (Seam), aunque ello solo se da por mero trámite, ya que el barro que queda de las aguas residuales que se secan no es nocivo para el ambiente.
“Es un procedimiento que solemos hacer y no hay consecuencias para el entorno”, expresó finalmente.