El Club de Escuelas Solidarias (CES) realizó ayer una doble jornada de juegos y aprendizajes en memoria de los dos niños, alumnos de la escuela, que fallecieron por impactos de bala.
Los niños de Cateura y Tablada recordaron a sus compañeritos Andrea Mereles y Fernando Cardozo con quienes compartieron muchos juegos, meriendas y la pasión por aprender.
Más de 4.000 voluntarios de los 6.000 que integran el Club de Escuelas Solidarias participaron de este homenaje que se realizó en simultáneo en Cateura y en Tablada.
Los jóvenes, que trabajan en más de siete zonas con más de 1.200 niños, señalaron que el sistema educativo convencional del país sigue en terapia intensiva y no da signos de mejoría.
“Hacemos un llamado a la sociedad a no abandonar el tema de la educación, sino seguiremos con más muertes, suicidios, violencia, abusos, adicción y pobreza”, indicaron los voluntarios.