Golpes que no se ven. La fiebre y el dolor articular intenso en el cuerpo son las manifestaciones más conocidas de chikungunya. Pero también hay otras que pueden potenciarse si uno ya viene padeciéndolas hace tiempo.
El riesgo aumenta cuando aparece el sangrado a causa de la enfermedad. En ese momento puede afectar todos los órganos, explica el doctor Guillermo Sequera, director de Vigilancia de la Salud.
“Puede llegar a afectar el hígado, el corazón, el cerebro. En este último caso, por eso se ve la meningoencefalitis que se ve en los niños y ancianos. El riñón también toca”.
Para las personas que tienen problemas renales o un solo riñón, chikungunya viene a complicar dicha condición.
Quienes padecen fallas en el corazón o tuvieron un infarto, la situación se agrava más, describió el epidemiólogo.
La situación tampoco es buena para quienes padecen hepatitis, describe Sequera. El virus también genera un daño importante al hígado.
Sobre este punto en particular, el referente de salud comentó que dos fallecidos padecían de cirrosis.
Sanos. El responsable de Vigilancia de la Salud también habló en qué medida afecta la arbovirosis a las personas que están sanas.
“Una persona que no tiene ni una enfermedad, al tener chikungunya se le puede medir sus valores del hígado, del corazón, las enzimas. Se verá que esos valores están elevados. Parecerá que tiene hepatitis, miocarditis, etc.”.
La miocarditis y las afecciones del riñón son las fallas más habituales que se están viendo entre los que fallecieron en la actual epidemia, detalló Sequera.
Esto se ve principalmente en los adultos mayores. Sin embargo, entre los fallecidos también estaba una persona de 34 años que padecía de diabetes.
En este tipo de pacientes la deshidratación es más rápida. “Su cuerpo trata de eliminar más agua para eliminar el azúcar en la sangre. Eso acelera el metabolismo, acelerando las funciones del riñón y también el corazón. Así se produce un infarto”, describió.
La afectación a nivel neurológico en los niños puede ser la fiebre intensa y convulsiones.
También se manifiesta con llantos, somnolencia, sin fuerzas para consumir la leche materna y vómitos.
En ese mismo nivel, en los adultos mayores se manifiesta también con fiebre que puede llegar a convulsiones.
“Duermen mucho y al despertarse no saben dónde están. También pueden empezar a decir cosas sin sentido, tener desvaríos”.
El área de Neurología de Adultos del Hospital de Clínicas ha registrado pacientes que describen manifestaciones neurológicas en un 5% a 14% aproximadamente a causa de chikungunya.
Dicha situación se da tanto en consultorio como en interconsultas, comentó la doctora Martha Sady Galeano, responsable de dicha área.
Se ha diagnosticado encefalitis, que consiste en una inflamación del cerebro, cuya causa es el virus de chikungunya; además del síndrome de Guillain Barré.
“Puede darse afectación de los pares craneales, parálisis facial y complicaciones ya sea de la médula como del cerebro, como encefalomielitis”, explicó Galeano.
Chikungunya no se caracteriza por generar sangrado importante como lo es con el dengue.
Sin embargo, Sequera enfatiza que aunque sea mínimo, quien padece chikungunya debe ir a consultar cuanto antes.
“El dolor abdominal es signo de alarma. Es un mal pronóstico. Otro es la somnolencia”, indicó.
“Una persona sana que padece de chikungunya, al medirle los valores de sus enzimas, se verá que están elevados”.
Guillermo Sequera, Vigilancia de la Salud.
“En la encefalitis que produce la enfermedad, puede presentar estado de confusión o convulsiones”.
Martha Sady Galeano, Neurología Clínicas.
Las cifras
33 es la cantidad de fallecimientos que se han producido por chikungunya hasta el momento en el país.
5 niños menores de un año que perdieron la vida a causa de las complicaciones provocadas por el virus.
11.650 casos de la enfermedad se han confirmado en el último reporte del MSP. El dengue asciende a los 246.