Las cooperativas Colonias Unidas y Chortitzer, además de la empresa Camica, habían sido adjudicadas para la provisión correspondiente al vaso de leche de la merienda escolar en el Departamento Central, pero enfrentan un juicio con la Gobernación para poder recibir los G. 14.000 millones que quedan por productos entregados en el 2015 y 2016, informó el presidente de la Cámara Paraguaya de Industriales Lácteos, Erno Bécker.
“Los productos se entregaron, la leche llegó de buena forma, fue consumida en tiempo y cómo no se va a cobrar, no se entiende”, lamentó.
Igualmente Bécker teme que las entidades descentralizadas ya no se animen a asumir contratos por falta de desembolsos desde el Ministerio de Hacienda.
ACTUAL GESTIÓN. Hubo el mismo inconveniente con otras gobernaciones, pero estas fueron poniéndose al día con sus compromisos, a excepción de Central, que sigue siendo una preocupación. “Central es el problema, el gobernador (Hugo Javier González) se comprometió a abonar esta semana como para aliviar esa cuenta añeja”, agregó el industrial.
Desde la institución no dieron información sobre el plan para honrar esta millonaria deuda porque el gobernador tendrá el informe completo al respecto recién la próxima semana.
Si bien la actual administración cumple con el contrato con los lecheros, debe sortear la deuda heredada de Blas Lanzoni, quien renunció a la Gobernación en el 2018 para lanzarse como candidato a senador, cargo que ocupa en representación del Partido Liberal Radical Auténtico.
En simultáneo a los trámites del juicio entre los proveedores y la Gobernación, esta última se comprometió a pagar a los lecheros.
MERIENDA ESCOLAR. Colonias Unidas y Chortitzer también fueron adjudicadas para proveer la proteína en el 2020 a las escuelas de Central.
Desde el sector lácteo apelan a reforzar el programa de un vaso de leche en el desayuno, ya que consideran que el almuerzo escolar llega de manera tardía al estudiante que debe construir conocimiento con el estómago vacío.
Actualmente hay sobrante de leche y los precios en finca no convencen al productor.
