Gustavo Saba
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En el primer tiempo fue muy parejo, la diferencia pasó a la hora de definir, cuando Libertad parecía que debía llegar hasta bajo el arco para marcar un gol, Palmeiras tuvo el remate de fuera del área de Scarpa que se convirtió en gol para el 1-0 paulista.
Infantil. El segundo tiempo siguió con esa tónica, Libertad apurando a Palmeiras, jugando de igual a igual, pero con mayor peso ofensivo ya con Tacuara en cancha.
Pero el error tonto de Iván Piris, pateando a Veiga en una jugada sin pelota, fuera de tiempo y con el VAR encima, le costó la roja y ahí se rompió toda paridad.
Porque a un equipo con rendimientos tan altos y parejos como Palmeiras no se le puede jugar en desventaja numérica de jugadores, por eso Libertad lo pagó muy caro.
Ya con dominio del balón, abriendo la cancha con los extremos, los brasileños dominaron el trámite y jugaron cómodos. Pese a que Tito Villalba tuvo un mano a mano que no pudo definir y podía meter de nuevo en partido al Repollero ya con el marcador 0-2; nuevamente el factor ineficacia pesó y sentenció.
De contra, Menino puso el 3-0 y la serie con un global de 4-1, premiando la eficacia de Palmeiras que aguarda en semis por River Plate de Argentina o Nacional de Uruguay.
La figura
Martín Silva
El portero salvó muchas jugadas claras de gol. Sin su destacada actuación la derrota pudo ser mucho más abultada.
La nota fuerte de la noche paulista fue el choque de cabezas entre Antonio Bareiro y Gustavo Gómez, a los 33’. Le costó el partido a ambos. Bareiro salió en el entretiempo y Gómez aguantó hasta los 58’, ambos muy mareados.