Según indicaron, la respuesta obtenida fue que cualquier decisión depende del presidente Santiago Peña, quien recién retornaría al país el próximo martes.
El titular de Petropar mencionó que la inversión del nuevo tren de molienda iniciado en el anterior gobierno será judicializada “debido a los indicios de una grosera facturación de implicaría al propio Mario Abdo Benítez”.
De esta forma, la concreción del tren de molienda tardará varios años lo que implicará que miles de toneladas van a ser desperdiciadas en las chacras por falta de capacidad de industrialización de la actual planta alcoholera de Petropar en Mauricio José Troche.
Los puntos 2 y 3, que se referían respectivamente al inicio de la zafra en la primera quincena de mayo y al incremento del precio por tonelada de caña de azúcar, quedaron relegados a un segundo plano. Eddie Jara, presidente de la alcoholera estatal, habría señalado que no puede tomar ninguna decisión sin antes consultar al presidente Peña.
Ante esta situación, los cañicultores esperarán la llegada del mandatario para solicitar una mesa de diálogo, considerando el riesgo de pérdidas millonarias para los productores de los departamentos de Guairá, Caaguazú y Caazapá.
Tras el informe de los 6 representantes cañeros que estuvieron en la reunión con Alliana y Jara, los cañicultores resolvieron en asamblea continuar con la medida de fuerza de la que forman parte una gran cantidad de agricultores que salieron en tractores, camiones, camionetas y furgonetas desde Mauricio José Troche con destino a la capital.
Despliegue policial. La Policía Nacional dispuso el despliegue de 1.000 efectivos, quienes no permitieron el avance de la marcha.
Sin embargo, se llegó a un acuerdo para que los manifestantes puedan avanzar unos kilómetros más hacia la capital.
“Seguiremos así hasta que mantengamos la mesa de diálogo con el presidente de la República”, dijo Richart Fonseca, presidente de los cañicultores.
Los cañicultores movilizados pertenecen a distritos de Guairá, Caazapá y Caaguazú y están en zozobra porque las obras del tren de molienda están paralizadas.