La campaña de reforestación CDE Respira completó el cultivo de 4.000 ejemplares de especies nativas en diferentes barrios de la capital departamental distribuidas en más de 20 plazas, parques y paseos centrales de avenidas. El proyecto se inició en febrero pasado y el objetivo es llegar a 5.000 árboles.
La iniciativa moviliza a estudiantes y ciudadanía organizada a través de comisiones. Apunta igualmente a la educación y concienciación sobre la protección de la naturaleza. Las últimas intervenciones se realizaron en la plaza San Miguel, del kilómetro 12 Acaray, con la cooperación voluntaria de estudiantes del último año de la media del colegio San Miguel.
Los alumnos fueron acompañados por el director de la institución, el profesor Celino Cáceres. Explicó que la tarea sirvió para complementar el proceso de aprendizaje en el marco del proyecto Hermosear la plaza de mi barrio, que forma parte del programa académico.
Señaló que de los alumnos de tercer curso, nivel medio, están desarrollando un proyecto de hermoseamiento de la plaza de la comunidad, que incluye la reforestación. “Nos sumamos al proyecto de la Comuna, que para nosotros también es muy importante. Los alumnos aprenden a cultivar y valorar el medioambiente, porque necesitamos plantar árboles”.
La dinámica acción permitió avanzar en la meta, ya que se pudieron plantar unos 250 ejemplares de especies nativas, como el tajy, yvyra pytã y guayaibí. La meta de cultivar 5.000 árboles podría completarse en este mes.
ETAPA FINAL. La ingeniera Emma Godoy, de la División de Proyectos y Educación de la Comuna local, refirió que los alumnos aprenden y se conciencian de lo importante que es plantar un árbol.
“Cultivamos las tres variedades del tajy. La idea es que puedan crecer todos juntos. Con este proyecto ya cubrimos unas 20 plazas en toda Ciudad del Este. Estamos llegando casi a la etapa final del proyecto con más de 4.000 árboles ya plantados”.
Refirió que la campaña apunta a una restauración ecológica en varios puntos de la ciudad y a fortalecer la conciencia ciudadana para la preservación de los espacios verdes, la recuperación de los cauces hídricos y la reforestación.
Comentó que la idea surge partiendo de la urgencia de que los espacios públicos de la ciudad requieren de la arborización, especialmente en los parques y jardines que cuentan con las condiciones necesarias, para disminuir la presencia de dióxido de carbono en el ambiente y producir oxígeno. Las arboledas también permiten regular la temperatura y brindar sombra para atenuar los rayos solares, agregó.
La tarea se inició en la plaza San Lorenzo, del barrio Ciudad Nueva, en febrero pasado, con la siembra de los plantines. Luego se extendió al barrio Boquerón, donde se realizó limpieza y arborización en la franja de protección del arroyo Amambay.
El plan se ejecuta a través de la Dirección de Gestión Ambiental de la Municipalidad de Ciudad del Este. Involucra a las Divisiones de Proyectos y Educación Ambiental y Áreas Protegidas y cuenta con el apoyo del Instituto Forestal Nacional (Infona).