Agentes de la Fuerza de Tarea Conjunta no hallaron rastros del enfermero que desapareció el viernes pasado de la propiedad de la estancia La Gringa, ubicada en Zanja Moroti, distrito de Azote’y.
El desaparecido es Bernardo Gómez Candado (36), enfermero, domiciliado en Zanja Moroti, quien en compañía de su tío Aurelio Gómez Dávalos (54) ingresó al monte el viernes de tarde para una cacería de animales silvestres.
Según la denuncia hecha a la Comisaria 14ª de Azote’y por Rosa María Gómez Candado, su hermano había ido con su tío a la cacería, pero que el sábado de mañana retornó su familiar comunicando que su sobrino se habría perdido en el bosque.
El mayor Luis Apesteguía, vocero de la FTC, indicó que llamativamente el tío no comunicó a la comisaría, sino que fue la hermana la que presentó la denuncia.
Destacó que, según la versión de Aurelio Dávalos, en el monte se separaron a unos 200 metros para el mangrullo y que dos disparos al aire serían el santo y seña para encontrarse. No obstante, dijo que Aurelio manifestó que escuchó un solo disparo, pero que de igual forma fue a ver a su sobrino, pero ya no lo encontró; se durmió en el monte y volvió a la mañana, sin radicar la denuncia.
Apesteguía indicó que ya se realizó el rastrillaje en la zona sin hallar evidencias y que la búsqueda proseguirá hoy.
Hay poca posibilidad de que haya sido secuestrado, dijo, ya que hace rato inteligencia militar no tiene dato de que la zona sea frecuentaba por grupos armados. (J.R.)
