El contingente está formado por bomberos militares, una decena de vehículos, dos microbuses y un helicóptero, que deberán actuar por 30 días a partir del jueves, plazo que podrá ser prorrogado en caso de necesidad.
La ayuda atiende a un pedido del gobernador del estado de Mato Grosso (centro-oeste), Mauro Mendes, quien formalizó esta semana una solicitud por más refuerzos y equipos, incluyendo militares y aviones, para combatir los incendios que ya han destruido cerca del 20% del Pantanal, que Brasil comparte con Bolivia y Paraguay.
En un memorando, Mendes destacó que el mayor humedal del mundo, que se extiende por unos 250.000 kilómetros cuadrados, sufre “una de las peores olas de incendios de los últimos años”.
La Fuerza Nacional de Seguridad es una unidad de policías profesionales y especializados cedidos por los estados brasileños.
Los agentes se unirán a las cerca de 2.500 personas, entre bomberos, socorristas y voluntarios, que combaten las llamas que castigan el Pantanal desde marzo, divididos en 40 equipos de combate al fuego en diversas regiones, así como con seis aeronaves y tres helicópteros.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE), los incendios en el Pantanal este mes ya doblaron los 2.887 registrados en los 30 días de setiembre de 2019. Jaguares, venados, caimanes y guacamayos azules, algunos amenazados de extinción, corren peligro debido a los incendios. EFE