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WASHINGTON-CARACAS
Un par de bombarderos B-1B sobrevolaron el mar Caribe frente a la costa de Venezuela el lunes, según datos de seguimiento de vuelos, en la tercera demostración de fuerza de este tipo de aviones militares estadounidenses en las últimas semanas.
El vuelo de los bombarderos supersónicos de largo alcance llega mientras Washington lleva a cabo una campaña militar contra supuestos narcotraficantes en la región, desplegando fuerzas que han generado temores en Caracas de que el cambio de régimen es el fin último de las operaciones.
Datos del sitio web Flightradar 24 muestran que los dos bombarderos –que despegaron de una base aérea en el estado de Dakota del Norte en Estados Unidos– volaron de manera paralela a la costa venezolana antes de desaparecer de la vista.
Estos vuelos ocurren después de que otro bombardero B-1B volara cerca de la costa venezolana la semana pasada, y otros B-52 lo hicieran la semana anterior.
PORTAAVIONES. Estados Unidos también ha ordenado al grupo de ataque del portaaviones USS Gerald R. Ford que se dirija a América Latina; ha desplegado 10 aviones de combate furtivos F-35 en Puerto Rico y actualmente tiene siete barcos de la Marina en el Caribe como parte de lo que llama esfuerzos contra el narcotráfico.
Washington ha llevado a cabo al menos 10 ataques contra supuestas embarcaciones de tráfico de drogas –nueve lanchas y un semisumergible– desde septiembre, que han dejado un saldo de al menos 43 muertos, según un conteo de la AFP basado en cifras del Gobierno de Estados Unidos.
Las tensiones regionales han aumentado como resultado de la campaña y el aumento militar que la acompaña. Venezuela ha acusado a Estados Unidos de querer tumbar al presidente Nicolás Maduro, quien a su vez acusó a Washington de “fabricar una guerra”.
Según Stephen Biddle, profesor en la Escuela de Asuntos Públicos e Internacionales de la Columbia University (Nueva York) e investigador adjunto sénior para política de defensa en el think tank Council on Foreign Relations (CFR), niega que el desplazamiento “predetermine un ataque” en la zona en el futuro.
“La Administración Trump es muy difícil de predecir en cuestiones como estas. Quizás su intención sea derrocar el régimen de Maduro y no se detendrán hasta conseguirlo. O quizás estén tratando de intimidar al Ejército venezolano para que fomente un golpe de Estado. O quizás todo esto sea solo bravuconería y no pase nada. Por ahora es imposible saberlo”, declara.
El despliegue naval estadounidense en el Caribe ya es el más grande desde la invasión de Panamá en 1989.