William Jefferson Clinton tiene previsto celebrar su cumpleaños durante el próximo fin de semana con una fiesta en la casa que su asesor más cercano desde que abandonó la Casa Blanca en 2001, Doug Band, tienen en la localidad neoyorquina de Water Mill, según apunta hoy la prensa local.
El diario The New York Post asegura que también acudirá a la fiesta su esposa, la secretaria de Estado, Hillary Rodham Clinton, quien hoy participa en una reunión de la Asamblea General de la ONU en Nueva York para anunciar un aumento de la ayuda que EE.UU. ha ofrecido para atender a las víctimas de las lluvias en Pakistán.
El año pasado, el ex presidente estadounidense, el único demócrata en ganar dos veces las elecciones desde Franklin Delano Roosevelt, no contó con la compañía de su esposa en la fiesta que organizó en Las Vegas (Nevada), porque ésta se encontraba de viaje en África por cuestiones de trabajo.
La hija de ambos, Chelsea Clinton, se casó hace a escasamente tres semanas con Marc Mezvinsky, lo que también se convirtió en una gran ocasión para celebrar una espectacular fiesta en el norte del estado de Nueva York.
Como muestra de su compromiso con los más necesitados, Clinton ha pedido a aquellos que quieran agasajarlo con regalos que lo hagan a través de donaciones económicas a su fundación destinadas a conseguir cumplir su ambiciosa lista de deseos para sus 64 años.
Entre los empeños de Clinton destacan, entre muchos otros, reducir en un 10 por ciento la malnutrición de los niños de Colombia y dotar a 20.000 granjeros de Malawi de las herramientas necesarias para mejorar sus condiciones de vida.
La fundación William J. Clinton informó de que con motivo de tan señalada fecha “un generoso donante se ha ofrecido a igualar las donaciones de hasta 50.000 dólares que se realicen en las próximas 72 horas para cumplir la lista de deseos” del ex mandatario.
A la espera de ver cumplidos sus deseos, el ex presidente, que forma parte de la Comisión Interina por la Reconstrucción de Haití (CIRH), anunció el miércoles la aprobación de una ayuda de 1.600 millones de dólares que han de permitir realizar 29 proyectos de recuperación en el país caribeño.