Para Szarán, esta ocasión les brinda pie para unir a diferentes formas del Barroco musical, profano y sacro, desarrollado, tanto en la región incaica como en la guaraní, “tanto por migrantes españoles e italianos, en los centros urbanos de la era colonial, así como aquellas en aislamiento en las Misiones Jesuíticas”, detalla.
El maestro Luis Szarán considera que de esta suerte de diálogo emergen los estilos, como el peruano, de estilo virtuosístico y, por momentos, allegado al sentir del mestizo y, por otro, el lenguaje barroco-jesuítico simplificado, en términos musicales anteponiendo el mensaje del texto por encima de lo ornamental o formal.
Finalmente, Szarán destacó y resaltó el aporte del músico invitado especial Alexander Chauffeaud para esta ocasión. El artista, de origen franco-paraguayo, nació en Asunción, en 1987. Se formó en Perú, Chile, Argentina y Paraguay, en clavecín, órgano y guitarra.