Se estima que la infraestructura estará lista en unos seis meses, luego se pasará a la etapa de instalación de equipamientos y trámites de los permisos sanitarios correspondientes. Todo el cronograma se revisará en el arranque del próximo año, atendiendo que el proyecto contempla la inversión de otros USD 20 millones para una industria de balanceados y una granja de matrices, según explicó Celito Cobalchini, tesorero de la Regional de Canindeyú de la Asociación Rural del Paraguay y uno de los accionistas de la empresa.
Actualmente están trabajando en la obra aproximadamente 100 personas, pero cuando las actividades de faena inicien se pretende generar 750 empleos directos y más de 1.500 indirectos.
Entre los trabajadores que serán beneficiados están los productores de Canindeyú, quienes no están acostumbrados a la producción industrial de cerdos. Al respecto, Cobalchini detalló que Incka Foods se encargará de la parte reproductiva, que requiere de una alta calidad genética, posteriormente los lechones de entre 20 y 30 días de nacidos serán trasladados –con los balanceados elaborados en la misma empresa– a las diferentes granjas para su cuidado y engorde. La cadena continúa con el retiro de los animales listos para faena.
En ese sentido, la industria proyecta una demanda de 120 granjas con una capacidad de 1.500 cerdos cada una. Como aún no existen estas instalaciones en los alrededores, los productores seleccionados con una previa inscripción deberán encargarse de invertir en sus establecimientos; para el efecto, el frigorífico ya inició conversaciones con los bancos, de manera que puedan acceder a créditos ventajosos. En principio se elegirán las propiedades más cercanas y que tengan caminos de todo tiempo para facilitar el traslado de animales.
Aunque la capacidad de faena será de 3.000 cerdos, los directivos aún deben analizar con qué cantidad arrancará sus operaciones. Una de las facilidades es la conexión con el mercado brasileño, ya que la multinacional Concepción, que es accionista mayoritario en Incka Foods, tiene compañías en el Brasil.
Si bien el comercio de la carne porcina está debilitado este año, la expectativa es conseguir mayor volumen para apostar a grandes compradores.
El frigorífico Incka Foods muestra un importante avance en su construcción, mientras que los productores de Katueté manifiestan un gran interés en instalar granjas de terminación para faena.