El detenido, de nombre Allan Paolo Paredes Roa (29), alias Nene, sería el hincha que desató los disturbios que dejaron varios heridos y fueron además motivo la suspensión del encuentro de fútbol.
La captura de Nene se produjo ayer, en la avenida Santísimo Sacramento casi Lombardo, del barrio Santísima Trinidad, de Asunción, frente al Hospital Central del Instituto de Previsión Social (IPS).
En la causa, Paredes Roa fue imputado por los hechos punibles de lesión grave y tentativa de homicidio doloso. Además, el fiscal de Pedro Juan Caballero, Samuel Valdez, pidió su captura y la de otros tres barrabravas olimpistas, que son Fernando Rubén Ayala Barrios, Juan José Vázquez y Óscar Raúl Chamorro.
Según la investigación, tanto Ayala Barrios como Paredes Roa serían los hinchas que realizaron los disparos con arma de fuego dentro del estadio pedrojuanino, desatando la pelea entre las dos facciones de la barra organizada.
La Fiscalía y la Policía individualizaron a estos dos hinchas a través del sistema de circuito de seguridad y otros mecanismos de control que cuenta el estadio Río Parapití. También fueron analizadas fotografías y filmaciones de diferentes medios de comunicación
antecedentes. Por el caso, el agente fiscal Valdez formuló la imputación contra 312 hinchas olimpistas por los hechos punibles de perturbación de la paz pública, resistencia, amenaza de hecho punible y trasgresión a la Ley 1866, de no violencia en los estadios deportivos.