Marisol Ramírez
A 113 días del inicio de la cuarentena por la pandemia Covid-19, la población atraviesa diversas circunstancias síquicas que deben ser tenidas en cuenta.
“Esta pandemia generó un doble impacto para muchos. Por un lado la incertidumbre, el temor a la muerte, el encierro, el tiempo sin tiempo, la desesperanza, y por el otro, la incapacidad de producir, trabajar, o directamente perder el trabajo”, analiza el Dr. Martín Moreno, siquiatra. La incertidumbre interpela a la persona; “a la vuelta de la esquina puede aparecer algo incierto, y a veces la persona puede no estar preparada para responder. En ese caso, aparecen la parálisis, la somatización, la confusión, la depresión, la negación, que son patrimonio de la crisis”, considera. Para el siquiatra, si una persona por ejemplo, en esta pandemia queda sin trabajo, en ella se darían sentimientos de tristeza, apatía y desesperanza en lo afectivo; y en lo conductual, habría inquietud, perplejidad, parálisis. “En el aspecto del desempeño funcional personal, muchas veces no se sabe qué hacer en el tiempo libre, cómo decir a la familia, cómo llevar la provisión cotidiana, cómo cubrir la cuota del colegio, mantener el alquiler o servicios básicos. Esa situación crea una desesperación, impotencia frente a este monstruo invisible que se llama Covid-19, y que le ponen de apellido pandemia”, señala. EMERGENTES Martín Moreno explica que el cambio de identidad de la ocupación, el encuentro con los compañeros y la identificación con el producto, hacen que las personas emerjan o desde la vulnerabilidad o desde sus factores protectores. “Cuando hablamos de vulnerabilidades, vamos hacia los antecedentes, tales como enfermedades mentales (ansiedad, depresión, consumo de sustancias, insomnio, tentativa suicida, episodios sicóticos), enfermedades crónicas (hipertensión, diabetes, problema inmunitario), y vemos que la situación estresante podría disparar o empeorar todo eso”, indica. Asimismo, las variables pueden ser que la persona tenga algún familiar enfermo o con discapacidad, o con problemas sensoriales, neurológicos o mentales. “Entonces, en ese ambiente familiar, en medio de la desazón sobre la cobertura económica, se genera una crisis en el proveedor. Antes podía proveer, hoy no, y tiene un público grande que lo mira y no puede dar respuesta a la situación. La vulnerabilidad impacta sobre otro aspecto: La forma de ser de la familia, de los vecinos, la espiritualidad, la comunicación, la capacidad creativa, todo esto implica un factor importante para la recuperación”, apunta. RESPUESTAS INSUFICIENTES El profesional considera que las respuestas de parte del Estado, como ser el aporte en efectivo o los kits de alimentos, no fueron suficientes para cubrir toda la demanda existente. “El descalabro de los colegios privados y los problemas del traspaso a la educación virtual también sumó a la incertidumbre; y esto agregado a la pérdida del trabajo, por ejemplo, se transforma en una crisis enorme que gatilla sobre la vulnerabilidad y debilidad de algunos, y hacen que la persona estalle, se quiebre y se enferme”, expone el médico psiquiatra. Ante todo esto, el Estado provee atención desde el 154, número habilitado por el Ministerio de Salud para que las personas reciban orientación sicológica y siquiátrica. También está el servicio telefónico habilitado por la Cátedra de Siquiatría y, por último, la telesiquiatría en el Hospital de Clínicas, “para contener, acompañar, orientar, o direccionar en el caso que necesiten una internación corta o larga”, explica.
La pandemia afecta más a personas vulnerables a nivel psíquico, emocional y con desventajas de diversa índole.
Telesiquiatría
A través de la modalidad virtual, la Cátedra de Siquiatría del Hospital de Clínicas, dependiente de la Facultad de Ciencias Médicas (FCM-UNA, Hospital de Clínicas), ofrece una alternativa a las consultas con los especialistas, por medio del servicio denominado Telesiquiatría.
El mismo está habilitado desde el 1 de junio de este año, y con él, los usuarios pueden realizar sus consultas a través de las plataformas virtuales como Skype, Zoom o Jitsi Meet (de Google), con previo agendamiento, accediendo al mismo ingresando al siguiente link: http://forms.gle/inH1CLmpub94VHRA9.