Hasta allí se llegaron miles de hinchas locales y argentinos que apoyaron a los catorce jugadores con quienes cuenta el entrenador Lionel Scaloni, comandos por Lio Messi, el más asediado de todos, por supuesto. Incluso un hincha saltó a la cancha con la intención de llegar hasta la estrella del PSG francés, pero no pudo llegar a él gracias a la intervención de los miembros de seguridad.
En las próximas horas Scaloni espera disponer del plantel completo con el que encarará el Mundial.