19 dic. 2025

Argaña: “Nicanor no parará hasta nombrar Papa a Lino”

El senador colorado dijo que existe un abierto contubernio entre el jefe de Estado y el Poder Judicial. Advirtió que la ANR corre un grave riesgo de perder el poder en el 2008 por culpa de Duarte Frutos.

“Ya podemos esperar cualquier cosa de Nicanor y Oviedo”, afirma el senador colorado Nelson Argaña, al enterarse de la decisión de la Corte Suprema de Justicia de admitir la revisión de la condena del ex militar.
“Nicanor no va a parar hasta nombrarle Papa a Lino Oviedo”, fue otra de las frases del legislador, quien dijo que en Julio ya denunció el contubernio entre el jefe de Estado y el ex general.
Agregó que existen elementos más que suficientes para sostener la colusión entre el titular del Poder Ejecutivo y el Poder Judicial, que se dio primeramente con el fallo del Tribunal Militar, luego con los dos fallos de la Corte que lo dejan fuera de toda investigación sobre la masacre del Marzo paraguayo y el magnicidio del vicepresidente de la República, Luis María Argaña.
“Es cierto que el objetivo principal es descomponer la Concertación y dividir a la oposición, pero todo por un precio demasiado alto para nosotros, que es haber transado con los que tienen las manos manchadas de sangre”, indicó el líder el Movimiento de Reconciliación Colorada.
Argaña también sostuvo que la intención del presidente Duarte Frutos es que Lino Oviedo sea candidato.
“El Partido Colorado está en serio riesgo de caer, porque se hacen primar los intereses personales”, sostuvo el senador.
ANTECEDENTES. Desde febrero de este año, los rumores e hipótesis de una eventual negociación entre el presidente Nicanor Duarte Frutos y el ex general Lino César Oviedo cobraron mayor fuerza, pese al constante desmentido del oficialismo.
La admisión en la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia del pedido de revisión de la condena de Oviedo fue el primer hecho político que instaló la duda y que generó la reacción de la familia Argaña, al punto de catalogar de “locos por el rekutu” al entorno del mandatario.
En esta fecha, la discusión se centró sobre la posibilidad de que Nicanor consiga los votos del oviedismo en el Congreso para plantear la enmienda de la Constitución Nacional, que le permita finalmente una reelección.
En los primeros días de marzo, el fiscal general del Estado, Rubén Candia Amarilla, elevó un dictamen favorable a la revisión de la condena del ex militar, por considerar la existencia de hechos nuevos que ameritan tal diligencia. Nuevamente se instaló la duda sobre la negociación de Duarte Frutos con el oviedismo y el líder del Movimiento de Reconciliación Colorada, Nelson Argaña, amenazó con retirar su apoyo al oficialismo de confirmarse la hipótesis. Tres meses después, dos diputados del Partido Unace reconocieron que hubo tal acercamiento.
CONCERTACIÓN. Cuando la aparente fiebre por la reelección fue desapareciendo del debate político, se sucedieron otros hechos relevantes que reavivaron las dudas sobre el acercamiento de Nicanor y Oviedo. Pero esta vez con el supuesto afán de lograr la división de la Concertación Nacional.
En primer lugar, el sorpresivo nombramiento del coronel Carlos Liseras Bado, hombre de confianza del presidente, como titular del Tribunal de Justicia Militar, días antes de que los abogados de ex general presenten el pedido de libertad condicional. En segundo lugar, el anuncio hecho por el mandatario de que en 30 días la Concertación Nacional se iría disolviendo.