Dentro de los cientos de ocupaciones ilegales que sufrió y sufre hasta la fecha la Itaipú Binacional, merece un capítulo aparte el caso de las areneras, pertenecientes a políticos de la zona, brasileños y contrabandistas, según lo corroboró el trabajo reciente de la Unidad Interinstitucional para la Prevención, Combate y Represión del Contrabando (UIC), dirigida por el ex fiscal Emilio Fúster.
En Salto del Guairá, la arenera Valois SA, cuyo propietario es Carlos Alberto Colmán Espínola, es una de las que lograron obtener licencia ambiental y utilizar una parte de la franja de protección de Itaipú para extraer arena del río, pese a que la Ley 752/79 establece que estas áreas deben ser de conservación.
Pero además de extraer arena, la firma ocupa el predio de Itaipú como puerto clandestino para el contrabando de cigarrillos de la marca que produce la firma Tabesa, propiedad del ex presidente Horacio Cartes, así como otros productos, según el trabajo realizado por la UIC.
Vecinos de la zona denuncian que pese al operativo realizado y el proceso con que cuenta el propietario, este puerto sigue funcionando en horas de la noche.
Otro supuesto arenero sindicado como responsable de dirigir un puerto clandestino es Arlindo Montanía, de la empresa BM Distribuidora, quien logró también una licencia ambiental para extraer arena del río sin afectar supuestamente la franja de Itaipú.
En el informe de la UIC aparece como responsable de uno de los puertos clandestinos allanados en Salto del Guairá que transportaban cigarrillos de Tabesa al lado brasileño a través del río Paraná, atravesando la franja de bosques de protección de la Itaipú Binacional.
Es importante destacar que el funcionamiento de estos puertos clandestinos se daba, y se sigue dando aparentemente con la absoluta complicidad de la Armada Paraguaya, ya que se identificó a varios marinos en estos puertos y uno funcionaba en pleno destacamento militar, el de Puerto Tigre.
DEMANDAS. El proceso de demandas judiciales –realizadas por la Dirección Jurídica de Itaipú durante el gobierno de Fernando Lugo– también alcanzó a las areneras. Algunas cerraron y otras lograron medidas judiciales que apañaron la invasión y la deforestación cometida contra la propiedad de la hidroeléctrica.
Los informes de Itaipú hablan de areneras ilegales que recaudan sumas millonarias en plena propiedad de Itaipú y mencionan como uno de los principales a Félix Paniagua, hermano del entonces intendente de Salto de Guairá, Eduardo Paniagua, propietario de la arenera Yogapo SRL, según la denuncia de los abogados de la binacional.
“Este dirigente político está imputado por la explotación ilegal de la arenera, y con orden de suspensión de las actividades por parte de la Seam, pero se niega a cumplir la medida, y amenaza con cerrar rutas y hacer otro tipo de medida de fuerza contra la Itaipú si se logra cerrar la arenera”, señala el informe.
Esta arenera funcionaba a lado mismo del puesto de la Armada Paraguaya, ubicada también dentro de la poligonal envolvente de Itaipú.
Yogapo y la arenera Tape Porã, de Lorenzo Fleitas, lograron medidas judiciales del juez Alberto Nelson Villagra para operar, pese a las disposiciones de la entonces Secretaría del Ambiente (Seam), hoy Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades).
Otra arenera que fue objeto de denuncia fue San Martinho, propiedad del ciudadano brasileño Milton José Andrei. Esta firma reclamó que las otras dos anteriores sigan sus actividades, mientras que ellos tuvieron que cerrar.
El trabajo de investigación de ÚH, con el apoyo de la Iniciativa para el Periodismo de Investigación del ICFJ en alianza con Connectas, corroboró que las reservas forestales de la Itaipú Binacional son invadidas desde propiedades de agroempresarios y también areneros para montar puertos de contrabando y narcotráfico entre Paraguay y Brasil.