19 abr. 2024

Araceli Sosa tenía fe en su inocencia

Bendición. Araceli Sosa junto con su padre y su madre.

Bendición. Araceli Sosa junto con su padre y su madre.

“La justicia tarda, pero cuando si de verdad somos inocentes tenemos que llegar a la última instancia y llegar a esto. Gracias a Dios hay buenos tribunales y se pudo demostrar. Lastimosamente no tenía que llegar a juicio oral, pero le dije a mi mamá y a mi papá que iba a continuar hasta la última instancia”, dijo Araceli Sosa, tras abrazar largamente a su madre y luego pedir la bendición a su padre.

Cuando se le consultó sobre el trabajo de la Fiscalía, señaló: ”No sé. Lo único que quiero es empezar de nuevo. Que me dejen en paz y también pedirle a la gente y le digo a los periodistas que no rompan más. Que la presunción de inocencia hay que respetar”.

Remarcó que “gracias a la prensa que en un momento dado la gente me trató como lo peor. Pero no soy una persona rencorosa. Quiero agarrarle a mi hija e irme a Caacupé que es la promesa que tenía”.

Se le preguntó si iba a accionar contra la Fiscalía. Refirió que “vamos a hablar después. Necesito verle a mi hija. Quiero rehacer mi vida. Le pido a la ciudadanía darme una oportunidad. Poder trabajar. Mantener a mi hija. Ayudarle a mis padres que perdieron su trabajo. Nos esperan muchas deudas. La justicia sí existe y no pierdan la fe cuando una persona es inocente”.

Araceli Sosa estuvo 5 meses presa, desde el mes de octubre del 2018, hasta marzo del 2019, cuando se cambió la calificación inicial de homicidio doloso en su contra.

Ayer, las juezas le absolvieron por absoluta falta de pruebas. La Fiscalía no probó los tres cargos en su contra, por lo que ahora está libre.

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