En horas de la tarde se aclaró que se restringirá el tránsito de personas y de vehículos que pretendan trasladarse desde la capital hacia el interior del territorio nacional, y viceversa, para el cumplimiento de las medidas sanitarias. Para el efecto, la labor de la policía y de los militares estará acompañada de fiscales, que anunciaron serán “implacables”.
El anuncio fue dado a conocer ayer por el ministro del Interior, Euclides Acevedo, y la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez.
Acevedo sostuvo que preocupa al Gobierno el mal comportamiento de una minoría de personas que no cumplen la cuarentena, y aseguró que si bien la Semana Santa comienza oficialmente la próxima semana, desde esta medianoche los controles se recrudecerán.
“Nos preocupa, nos inquieta el comportamiento indisciplinado de una minoría que no es consciente de esta epidemia; es cierto, nuestros hospitales no están llenos, tenemos disminución de infección y quiere decir que hicimos bien las cosas, por eso pedimos que se cumplan las normas. El Gobierno no quiere ser testigo de la tragedia y de la muerte”, expresó.
“Los controles serán estrictos, se someterán al escrutinio los que intenten trasladarse de la capital al interior o viceversa. Salvo emergencia de carácter humanitario. Aquel que no justificare su desplazamiento se le va a invitar a que vuelva a su domicilio; si no lo hace, estará ahí el fiscal. Creemos en la conciencia ciudadana pero también seremos inflexibles”, añadió.
Por su parte, la titular del Ministerio Público, Sandra Quiñónez, manifestó que serán implacables con aquellas personas que violen la normativa y sostuvo que se exponen a duras penas en caso de no acatar las medidas.
“Velaremos por el estricto cumplimiento de las medidas sanitarias; no queremos imputar ni detener. No vamos a permitir la violación de lo dispuesto por las autoridades sanitarias. Queremos en algún momento volver a abrazarnos, pero depende de cada uno de nosotros. Fiscales adjuntos acompañarán a la policía y a las FFAA para el estricto cumplimiento. Seremos implacables”, dijo.
NUEVA AMENAZA A LA SALUD