La jueza en lo Civil, Tania Irún, anuló todo el proceso que se formó en el Juzgado de Paz de San Roque a la senadora Desireé Masi, por violencia de género, porque la jueza de Paz, Liliana González de Bristot, no pidió el desafuero.
La legisladora y varias otras personas habían sido denunciadas en setiembre del 2020 por Silvia Páez Monges por violencia de género ante la citada magistrada de Paz de San Roque.
Ante esto, la magistrada González de Bristot admitió la denuncia, y dictó la prohibición de que la citada senadora y otra persona ejercieran ningún tipo de violencia vía redes sociales (Twitter, Facebook, Instagram, WhatsApp, etc.), contra la denunciante.
Además, señaló incluso audiencia para el 18 de diciembre pasado.
Ante esto, el abogado Guillermo Duarte planteó el incidente de nulidad del proceso, ya que no se pidió el desafuero de la senadora.
La jueza de Paz, Liliana González de Bristot, rechazó in límine el incidente porque supuestamente era extemporáneo. Esto fue apelado ante el Juzgado en lo Civil, a cargo de Tania Irún, quien ayer dictó resolución.
En grado de apelación, ya que se trata de un proceso en un juzgado de Paz, la jueza estudió el recurso planteado por la defensa de Masi.
Señala que el artículo 191 de la Carta Magna exige que hay que comunicar la formación del proceso a un legislador, para ver si se admite o no el desafuero, lo que no se hizo. Así, anuló la causa.