19 abr. 2024

Análisis de la Trinacional sobre el río también evidencia exceso de metales

Los análisis de calidad de agua de la Comisión Trinacional para el Desarrollo de la Cuenca del río Pilcomayo muestran resultados de varios años en los que los metales pesados como: Plomo, manganeso, hierro y níquel, principalmente, sobrepasan el límite que establece tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el Padrón de Calidad de Aguas para Paraguay (ver infografía).

En el lado paraguayo, los valores que exceden lo permitido figuran sobre todo aguas arriba, cerca de la triple frontera del río, que es compartido con Bolivia y Argentina. Los registros de la Trinacional –a los que se pude acceder solo con un usuario y contraseña que deben aprobar previamente los directivos– y estudios independientes, como el de la Universidad Autónoma Juan Misael Saracho, Tarija, Bolivia, muestran un histórico de valores altos.

Esto no solo en la cuenca alta, en el territorio del vecino país, donde existe amenaza de minerías que utilizan estos metales, cerca del Pilcomayo. Los altos valores de plomo y manganeso se ven en la triple frontera. Estos datos nunca fueron compartidos con pobladores ribereños de los tres países, que toman agua cruda del cauce y dependen de la pesca

“Todo normal”. Antes de acceder a los datos de la Trinacional, consultado sobre el registro, el director de la Comisión Nacional Pilcomayo y delegado Técnico en la Trinacional, había declarado que: “está todo dentro de la normalidad. Hay algunos metales que de por sí en el Chaco son altos, como el boro, el hierro, pero está todo dentro de los parámetros normales de lo que es el histórico, no es que haya aumentado o disminuido. En el Chaco hay más metales pesados, pero que es normal. Es decir, son datos altos (sic). Es por la característica del suelo”.

El director de Recursos Hídricos del mismo Ministerio del Ambiente, José Silvero, también alegó que siempre hubo presencia de metales pesados por la actividad minera pero “no hay un caso como para alertar a la población ni de crear emergencia”.

Desde la Comisión Trinacional se evitó responder sobre la presencia o no de metales pesados en el Pilcomayo. Se derivó además la responsabilidad de comunicar sobre la calidad de agua a la Comisión Nacional y al Ministerio del Ambiente.

Monitoreo. Los especialistas en recursos hídricos del Centro Multidisciplinario de Investigaciones Tecnológicas (Cemit) de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) señalan clave un monitoreo permanente de la calidad de agua, sedimento y peces de manera planificada.

Estudiar la geología de la zona también consideran indispensable, atendiendo a que las rocas también liberan metales como el arsénico y el hierro. Indican necesario una mesa interinstitucional, pero hasta ahora las autoridades competentes no concretan. También ofrecer alternativa a los moradores afectados, hasta tanto se realicen medidas como la construcción de un sistema de tratamiento.

Lea la investigación transnacional: accesoinvestigativo.com/venenopilcomayo/index.html


pilcomayo tóxico

Autoridades locales alegaron que los metales pesados en el río Pilcomayo siempre estuvieron dentro de lo normal. Pero registro muestra altos valores en el cauce, en puertas de Paraguay.

Totales y disueltos
Los valores que se tuvieron en cuenta son de metales totales. Especialistas de Cemit explican que los totales se tratan de todo lo que existe en el río y absorben los animales. Los disueltos pasan por un proceso de filtración para separar los contaminantes, pero para quienes toman agua cruda, advierten que siempre habrá riesgo ya que el tratamiento es casero.
Recuerdan que el alimento de origen animal del río contaminado es una manera indirecta de introducir al organismo los metales como plomo, níquel y otros.

Están todos dentro del parámetro normal de lo que es el histórico, no es que los valores hayan aumentado o disminuido.
Artur Niedhammer,
Dir. Comisión Nacional.

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