El suceso ocurrió la madrugada del viernes al sábado en la provincia suroriental de Hunan, en un tramo de la autovía que lleva desde la metrópolis de Shanghái (este) a la ciudad sureña de Kunming, cuando un camión que transportaba líquido inflamable -al parecer, alcohol- chocó contra un autobús de pasajeros con capacidad para transportar a 53 personas, lo que provocó posteriormente una explosión.
CCTV confirma que al menos cinco personas pudieron escapar, aunque con quemaduras graves, y que “alrededor de 40" han perecido. De momento, se desconoce el estado de los restantes.
Entre los fallecidos, se encuentra el conductor del camión y un acompañante, según la agencia oficial de noticias Xinhua, que apunta que cinco coches se calcinaron en la explosión y que el accidente provocó otras colisiones de vehículos que sucedían al camión.
En fotografías que los medios de comunicación chinos han comenzado a publicar en internet se puede ver el tramo de la carretera con una gran humareda, y numerosos coches calcinados.
También se distingue el choque entre el camión y el autobús, y cómo el primero colisionó con la parte trasera del segundo.
El fuego se ha logrado extinguir a primera hora de la mañana de este sábado, si bien los equipos de rescate siguen trabajando en la zona.