Sociedad de la furia. El incremento de las cifras en lo que involucra a la violencia intrafamiliar, pinta el hervidero de rabia presente en el día a día.
En lo que va del año, hasta el mes de junio, el Hospital del Trauma registró 357 atenciones por violencia intrafamiliar. “Llama la atención el incremento, además de las agresiones por arma blanca y de fuego. En los últimos cinco años, esto no era así. Las cifras más importantes correspondían a los accidentes de tránsito”, expresó el doctor Agustín Saldívar, director del centro asistencial.
El incremento se registró en los dos últimos años, detalló. Saldívar estima como causa, la situación económica por la que atraviesa el país. El centro asistencial cuenta con un área que se encarga de diagnosticar y acelerar los trámites en estos casos. Esto también influye para que las estadísticas se engrosen.
Razones. Desde la Dirección de Salud Mental también se confirma un aumento de la violencia familiar y enfocada principalmente en el género femenino. Esta es la cuarta causa de consultas en esta área, cuenta la doctora Mirta Mendoza, responsable de dicha dirección.
Sin embargo, señaló no conocer estudio alguno que indique al factor económico como causante de la situación.
“Eso nos llevaría a pensar que las personas de escasos recursos son las más violentas. Sin embargo, esto ocurre en todos los estratos sociales”, destacó.
La referente de salud mental agregó que la situación económica es una de otras que resultan estresantes en el diario vivir.
Como ejemplo de violencia hacia las mujeres, mencionó un estudio hecho en Ciudad Juárez (México). La investigación señalaba que la violencia hacia las mujeres tenía dos motivos principales: Con la agresión, el hombre quería mostrar su poder de sometimiento a la mujer y a su vez mostrarse ante sus pares.
Además señaló que entre las causas suele darse antecendentes familiares de situaciones de violencia.
Como hecho positivo, Mendoza coincide con los referentes del Hospital del Trauma, en que existe mayor difusión de estas situaciones. Sin embargo, alerta sobre el riesgo de que esa difusión impulse a replicar esas conductas. Insta a informar sobre estos hechos de manera responsable.
Miradas. En un análisis más general sobre la violencia social, el psiquiatra y docente Agustín Barúa, señala que cada uno debería preguntarse cómo está saliendo a la calle cada día, cómo maneja uno la rabia que se va acumulando.
Otro ejercicio es intentar comprender qué cuestiones pueden haber detrás de las reacciones violentas de otras personas.
Por su parte, la doctora Mirta Mendoza recomienda tomarse el tiempo para compartir con amigos, conocidos o familiares en distendidas rondas de conversaciones.
Indicó que si la persona tiene problemas para controlar sus impulsos debe acudir con un especialista de salud mental.
Otra manera de descomprimir la tensión, es realizando actividad física y deportes. Este último punto, enfatiza que deber ser con el fin de relajarse, no con anhelo de competición. Sobre todo porque el competir suele convertirse en detonador.