El hombre está imputado por violación del deber del cuidado y pornografía infantil y se encontraba preso en el Departamento Judicial de la Policía.
Pasadas las 13:00, Reiner fue alzado a un móvil de traslado del Ministerio de Justicia, desde la sede policial, en medio de una manifestación realizada por organizaciones que velan por los derechos de los niños y que venían pidiendo con insistencia el traslado del imputado a una sede penitenciaria. Se retiró sin dar declaraciones.
Su abogado, Max Narváez, expresó que durante mucho tiempo se opuso al traslado de su cliente, porque supuestamente su vida corre peligro a causa de la pandemia.
“Con este escrache rentado que se tiene en contra de mi cliente, quieren que se vaya a la cárcel. Porque ahí está en peligro”, explicó el defensor de Oberuber.