Santos fue contundente en el Vila Belmiro, desnivelando el marcador en el primer cuarto de juego, a través de uno de sus mejores expositores futbolísticos: Pituca. Si bien los xeneixes equilibraron las acciones hasta el fin del primer tiempo, no lograron empatar el juego y no iban cinco minutos de la segunda fracción cuando otro jugador desequilibrante de los locales, el venezolano, el pequeño (1.60 m de estatura), pero talentoso Yeferson Soteldo, decretó el segundo gol y, dos minutos más tarde, Lucas Braga hizo el tercero, prematuramente definitivo. Más cuando Boca se quedó con diez hombres por la justa expulsión del colombiano Frank Fabra.
Final paulista en Río. Todo quedará en Brasil. Palmeiras y Santos definirán el próximo 30 de enero a qué vitrina irá a parar el prestigioso trofeo que en 2020 cumplió sesenta años. La final tendrá su escenario en otra ciudad brasileña, esta vez en la capital, Río de Janeiro, en el legendario estadio Maracaná. Santos alcanza su quinta final y buscará ser tricampeón. Su rival, Palmeiras, que el martes eliminó al River Plate también argentino, estará también en su quinta instancia decisiva y persigue el bicampeonato.