15:38-04/04/07
Río de Janeiro, (EFE)
La “autorización previa” de la adquisición de VRG Líneas Aéreas (Nueva Varig) por la GTI S.A, una subsidiaria de Gol, fue concedida en una reunión del directorio de la Anac que tuvo lugar este martes, dijo la entidad oficial en un escueto comunicado.
“En virtud del valor de la transacción” el tema será obligatoriamente analizado por el Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE), el organismo que regula la libre competencia en el mercado brasileño.
La compra de “Nueva Varig” fue anunciada el 28 de marzo y le dio un nuevo aire a la malograda empresa que resultó del remate judicial de la tradicional Varig, que una vez fue dueña absoluta de los cielos brasileños.
Gol, que opera en el segmento de “bajos costos, bajas tarifas”, adquiere Varig por 320 millones de dólares pagaderos en efectivo, acciones y rescate de deuda.
La operación incluye el pago de 98 millones de dólares en dinero, la entrega de 6,1 millones de acciones preferenciales emitidas por Gol y la obligación de honrar 100 millones de reales (unos 50 millones de dólares) en papeles comerciales emitidos por Nueva Varig.
Las empresas tendrán contabilidades separadas, sus modelos de negocios tendrán focos bien definidos y se mantendrá separada la marca Varig, explicó Gol oportunamente.
Varig “ofrecerá servicios diferenciados con vuelos directos” y seguirá con el programa de millas y fidelidad de marca “Smiles”, que hoy posee más de cinco millones de clientes.
En vuelos internacionales de larga distancia y en mercados de alto tráfico en Sudamérica, Varig ofrecerá las clases económica y ejecutiva, mientras en Brasil tendrá una sola clase y dará prioridad a las conexiones entre los principales centros económicos del país.
Varig controla hoy apenas el 4,74 por ciento del mercado brasileño, con una flota de 17 aviones que está previsto aumentar a 34.
Tiene autorización para cubrir 10 destinos internacionales desde Brasil: Frankfurt, Londres, Madrid, Milán, París, Miami, Nueva York, Ciudad de México, Buenos Aires, Santiago, Bogotá y Caracas.
La llamada Nueva Varig fue creada como una unidad separada de la quebrada Varig y adquirida en julio de 2006 en un remate judicial por un consorcio formado por empresarios brasileños y el fondo estadounidense Matlin Patterson.