La jornada contó con el apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) y el Centro de Estudios Ambientales y Sociales (Ceamso).
El operador económico autorizado, según explicaron en el arranque del evento, es una recomendación establecida por la Organización Mundial de Aduanas (OMA). Su implementación concede beneficios a las empresas que operan en comercio exterior y las sitúa a la par de las exigencias del mercado internacional, generando confiabilidad y reconocimiento como socio seguro en otros países.
El titular de Aduanas, Julio Fernández, resaltó que el OEA es uno de los instrumentos coadyuvantes de la facilitación del comercio y que ya lo pusieron en vigencia “con el objetivo principal de compartir responsabilidades de seguridad en la cadena logística con el sector privado, por lo que es de fundamental importancia su fortalecimiento, lo cual se está llevando a cabo por medio de la cooperación Usaid-Ceamso”.
Indicó que las responsabilidades compartidas de garantizar la seguridad de la cadena logística del comercio internacional se establecen mediante una alianza estratégica entre la aduana y el sector privado, y bajo estas alianzas la DNA ofrece beneficios tangibles e intangibles relacionados con la facilitación del comercio.
Por su parte, la directora de Usaid, Evelyn Rodríguez, manifestó que estaba impresionada por la magnitud y la concurrencia de representantes de los países participantes y el sector privado en el evento.
Dijo que el ente aduanero tiene un papel clave en la economía del país, acompañando en forma sostenida el proceso. Refirió que esta institución no solo controla la entrada y salida de productos del país, colaborando y aumentando los ingresos tributarios, “sino también dinamiza la economía del país, atrayendo inversiones extranjeras y facilitando el comercio”. Durante la jornada se expusieron experiencias sobre el OEA.