Tampoco se permite a los camarógrafos y fotógrafos ingresar a las reuniones para tomar imágenes y fotos que son fundamentales para el trabajo periodístico.
Todas las plantas de la sede del partido de gobierno son controladas por guardias que restringen el ingreso de las personas. Solamente en la planta baja hay alrededor de seis guardias.
El tiempo de permanencia en las instalaciones también es medido y no es posible estar más tiempo del establecido.
Horacio Cartes, a pesar de contar con un holding de medios de comunicación, se muestra alejado de la opinión pública y no accede a hablar con la prensa.
Desde que asumió la presidencia del Partido Colorado se mostró distante de los medios y todas las reuniones a las que asiste considera “privadas”. En otras administraciones, el panorama era distinto y más accesible.
Ya en la proclamación realizada el 10 de enero pasado, los guardias no dejaron ingresar a muchas personas al acto. Tanto miembros de la Junta de Gobierno, intendentes, candidatos y otros ingresaron a la fuerza.
El otro día, el ex presidente y miembro de la Junta de Gobierno Nicanor Duarte Frutos tuvo un altercado con los guardias que no lo dejaban entrar a una reunión.
No obstante, a quienes está permitido acceder y hablar con Cartes son los dirigentes que le llevan comunicados de respaldo y loas, para seguir en el cargo, pese a estar sancionado por el Gobierno de Estados Unidos.
Tras la reunión con los miembros de la Comisión Ejecutiva, Cartes recibió ayer a Daisy Sanabria, vicepresidenta de la Seccional Colorada 456 de Miami, quien le entregó una nota de los 5 presidentes de seccionales de EEUU, que “expresan su solidaridad, lealtad y total apoyo a su gestión al frente del grande y poderoso Partido Colorado”.