Desde esa época, en un país en donde pocas experiencias de empresas de comunicación han podido sostenerse y lograr continuidad en el tiempo, ÚLTIMA HORA fue creciendo y transformándose en uno de los íconos más importantes del periodismo paraguayo.
La marca ya traía además consigo una rica historia periodística que se fue construyendo desde las primeras décadas del siglo pasado. Aquellas primeras ediciones de modestas 16 páginas en blanco y negro, tamaño tabloide, habían sido impresas con las mismas viejas máquinas de linotipo con las que se habían editado varios legendarios periódicos como El País, El Orden, La Mañana, La Tarde, en el mismo histórico edificio de la calle Benjamín Constant 658, en donde sigue funcionando la actual Redacción, que se fue modernizando con el paso del tiempo para adaptarse a los cambios tecnológicos en el mundo de la comunicación,
El proceso de consolidar un medio independiente en el Paraguay no ha resultado fácil. En épocas de la dictadura stronista, la circulación de ÚLTIMA HORA fue suspendida en junio de 1979 por una arbitraria resolución del Ministerio del Interior, en represalia a publicaciones críticas. Varios periodistas sufrieron persecuciones y apresamientos, como los editores Fernando Cazenave y Félix Humberto Paiva, llevados por policías desde la redacción en diciembre de 1982 por orden directa del dictador.
Con aciertos y errores, en casi cinco décadas hemos podido mantener el contacto cotidiano con nuestros lectores, cumpliendo la misión de consolidar el periodismo como una forma de servicio al público, acercando la información más oportuna y veraz a la ciudadanía, a fin de que ella pueda formarse un criterio cada vez más acertado acerca de la realidad política, económica y social.
Asumiendo las innovaciones tecnológicas que impone la era digital, nuestra misión periodística sigue siendo la misma de aquel primer día: brindar la noticia cotidiana, debidamente contextualizada, elaborada con responsabilidad y ética periodística, junto a los artículos de opinión analítica, los reportajes en profundidad, las series de investigación que ponen en evidencia los males que hay que corregir, buscamos que la prensa siga contribuyendo a brindar transparencia.
En la actual situación de crisis por la pandemia del Covid-19, el periodismo se ha vuelto aún más necesario para mantener informada y conectada a la ciudadanía, para ejercer un rol contralor sobre el poder, para alzar la voz ante los abusos y reivindicar los valores democráticos. Ante nuevos desafíos, renovamos el compromiso de seguir ejerciendo nuestra misión desde todas las plataformas periodísticas, en la construcción de un país equitativo, de oportunidades para todos, con mayor bienestar, sin impunidad, respetuoso del medioambiente, soberano y con un desarrollo sustentable. ¡Gracias por acompañarnos!