01 jun. 2025

Una iniciativa ciudadana plantea que se restrinja la cantidad de asesores

El joven Julio Olmedo Cabrera propone, en una nota al Senado, que el servicio sea voluntario y se ponga un límite. En la mayoría de las instituciones, el rubro para asesorías representa un gasto considerable.

En sus manos.  Arnaldo Giuzzio consulta su agenda, mientras su colega Desirée Masi interviene en la sesión del Senado.

En sus manos. Arnaldo Giuzzio consulta su agenda, mientras su colega Desirée Masi interviene en la sesión del Senado.

La preocupación por los excesivos gastos que las instituciones estatales realizan en concepto de asesoría llevó al joven Julio Olmedo Cabrera a presentar una propuesta que espera se convierta en ley.

El ciudadano con su iniciativa apunta a terminar con los hechos de corrupción citando el cobro indebido de honorarios y las ausencias en los puestos laborales.

Eso es lo que expresa en su nota dirigida al senador Arnaldo Giuzzio, quien se comprometió a hacerse cargo del proyecto.

No solo en el Congreso, sino en todas las instituciones públicas los servicios de asesoría representan un gasto considerable para el Estado.

Cabrera, un joven que está a punto de llegar a su meta de ser piloto, plasmó su propuesta también en las redes sociales en donde obtuvo una gran aceptación de la gente.

“El proyecto busca eliminar la corrupción y el mal uso que se está haciendo de nuestro dinero público, al ubicar personas no aptas en la función pública con salarios enormes, por supuesta asesoría”, considera el ciudadano.

En su cuenta de Facebook, pide a sus seguidores que compartan la imagen para que en el Congreso sepan que el senador Giuzzio tiene el respaldo para que se pueda llegar a promulgar como ley.

Cabrera se escuda en el artículo 123 de la Constitución Nacional, que hace referencia a la iniciativa popular para proponer al Congreso proyectos de ley.

Con relación a todas las instituciones públicas, su propuesta específica es que el cargo de asesor ya no tenga rubros y sea voluntario, “de tal modo que si se desea contar con el servicio de un asesor, sea íntegramente pagado por el director o gerente que lo requiera”, sugiere.

En cuanto al Congreso Nacional, el planteamiento es que se limite a dos el número de asesores por cada parlamentario, y que el segundo sea pagado con los fondos del propio senador que lo solicite.

“Quedaría abierto a discusión fijar el monto del salario para el primer asesor del parlamentario, no pudiendo exceder el valor actual”, alega.

“Esta medida que pudiera parecer extrema, se hace necesaria ante los últimos sucesos que revelaron que personas evidentemente sin la formación ni la aptitud necesaria ocupan dichos cargos, con salarios desacordes con la realidad de nuestro país, que aún lidia con altos porcentajes de extrema pobreza”, añade.

Considera que los recursos económicos y las recaudaciones necesitan ser aprovechados de manera más eficiente.

Se debe trabajar. Giuzzio elogió la iniciativa y se comprometió a armar el proyecto de ley y debatir con sus demás colegas. Dijo que la limitación de los rubros para asesoría se debe dar tanto en el sector público en general como en la administración central, incluso en todos los poderes del Estado. Sostuvo que este tipo de ideas justamente surgen por los excesos.

“Muchas de esas funciones cumplen personas que no tienen la aptitud necesaria, no tienen preparación, sino que son probablemente algún tipo de referente político o algún puntero político”, señaló.

“Puede llegar a ser muy saludable”, consideró.