Él se dedica a la jardinería, pero en esta época se convierte en artesano para armar grandes figuras de animales y de la Sagrada Familia.
Con algunas maderas, un poco de tierra colorada, cemento, pinturas y otros elementos que debe comprar y otros que recibe como colaboración, en la quincena de noviembre comienza a trabajar en su pesebre.
“Lo que más cuesta hacer es el rostro, el resto es fácil y hago todo solo”, comenta don Gilberto mientras recorre su patio y va limpiando las figuras que tienen el rastro de la lluvia.
Vive con su esposa, con quien tiene tres hijos, pero en la casa ya solo quedan ellos y su mascota, un loro.
El pesebre estará habilitado desde este sábado hasta Semana Santa. Se encuentra en la Primera Compañía de Luque, sobre la calle Santa Cecilia, a mil metros de la Conmebol (detrás del supermercado España).
Las figuras son de tamaño real, las más altas miden 1, 80 metros aproximadamente y están preparadas como para que los niños suban a ellas y se tomen algunas fotografías.
Más allá de una tradición, para don Gilberto es una forma de agradecer a Dios por las bendiciones que recibe cada año. “No me falta salud ni trabajo, ni a mi familia, eso es lo importante”, resalta.
Su único reclamo es que desde hace unos años no recibe pan dulce y sidra de regalo, contó entre risas mientras despedía al equipo de ULTIMAHORA.COM que llegó hasta su casa.