Así intentan aprender las lecciones diarias al aire libre, donde los bocinazos, el “adiós” de los vecinos y molestos ruidos están a la orden del día. La institución educativa oficial tampoco cuenta con vallado perimetral.
Dan clases de esta manera porque el Municipio de Lambaré les construyó aulas por más de G. 149 millones, con recursos del Fonacide, en el 2014. Pero apenas un año después, se encontraron numerosas irregularidades en las obras. Las salas quedaron clausuradas, declaradas en peligro de derrumbe por la cartera educativa y los bomberos voluntarios.
A dos años de aquel suceso, los más afectados son los estudiantes y sus docentes.
Las promesas siguen sin ser cumplidas por la actual administración del intendente Armando Gómez.
Prometieron que el inicio de un nuevo pabellón arrancaría este mes; sin embargo, ni un solo ladrillo llegó hasta el predio de Ava Mba’e.
LARGA ESPERA. La coordinadora del Nivel Medio del colegio lambareño, Norma Bejarano, lamentó la desidia de las autoridades que mantienen ilusionada a toda la comunidad educativa.
“Estos son casos urgentes, nuestra escuela es prioridad número uno supuestamente en la ciudad, pero los trabajos se están retrasando”, comentó.
Expresó que por este motivo están recurriendo al MEC para tratar de presionar a la Municipalidad. Antes de erigir un nuevo pabellón, se debe demoler lo mal hecho por Cárdenas.
La coordinadora aseguró que bajo la carpa provisoria los chicos y docentes presentan constantes síntomas como dolores de cabeza o náuseas.
“Cuando el sol está fuerte, te golpea la vista”, comentó un estudiante.
Pese a la situación, el registro de asistencia de los dos cursos de la Media que dan clases en el patio es muy alto.
“Es una zona vulnerable de Lambaré, donde los jóvenes quieren aprender para salir adelante”, contó Bejarano.
ÚH intentó comunicarse con la fiscala de Obras de Lambaré, Patricia Milessi, pero su teléfono celular se encontraba apagado. Según trascendió, la licitación de Ava Mba’e todavía no está concluida.