25 may. 2025

Tras años de añoranza, compatriotas se reencuentran con sus familiares

La emoción y la ansiedad empiezan a cobrar fuerza en el Silvio Pettirossi en estas fechas. Cientos de paraguayos arriban desde distintos puntos del mundo. Estiman superar 1.200.000 viajeros al cierre del año.

Giuliana Macen tenía 11 años cuando su madre la llevó a vivir a Suiza, país donde esta última emigró en busca de un futuro mejor. La menor debía enfrentarse a una realidad distinta a la que estaba acostumbraba y con la nostalgia de estar alejada de los abuelos, quienes la resguardaron durante los primeros años en que su progenitora viajó. Sin embargo, ayer la añoranza fue compensada con un fuerte abrazo, ya que volvió a reencontrarse con la familia paraguaya que la vio crecer en la ciudad de Ñemby.

De este emotivo encuentro, como otros más, a diario es mudo testigo el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi, ya que muchas familias se dividieron ante el éxodo económico. El espíritu de ansiedad y la alegría en el lugar empiezan a cobrar más fuerza en estas fechas. Miles de compatriotas vuelven a su lugar de origen para pasar las fiestas de fin de año con sus familiares.

Carteles de bienvenida, globos, ramos de flores, además de rostros que reflejaban nerviosismo y felicidad se observaba ayer frente a las puertas de desembarque. La carga de sentimientos de los familiares, que vuelven a verse después de un largo tiempo lo sellan entre lágrimas, con besos y abrazos, cuyas mágicas sensaciones no pueden otorgar ni el más moderno aparato móvil, a través del cual logran estar frecuentemente comunicados.

“Es una emoción muy grande porque viví acá durante mi infancia y hoy vuelvo luego de tres años de Suiza. Fue muy difícil empezar de cero; tuve que repetir un año en la escuela por el tema del idioma, pero logré superarlo. Lo que más extraño de Paraguay son a los familiares y la comida típica”, destacó Giuliana mientras la rodeaban los abuelos, tíos y primos que fueron a recibirla a ella y a su madre, Liliana Macen.

Por su parte, Liliana afirmó que en cada retorno la emoción es inmensa, al ver a sus seres queridos luego de años. “Solo los que viven lejos de los que aman pueden entender lo que significa volver a encontrarse con ellos. La alegría que siento es inmensa porque pasaremos juntos las fiestas”, exclamó la mujer que vive fuera del país hace 11 años.

Pasajeros. El administrador del Aeropuerto, Rubén Aguilar, señaló que hasta el cierre del mes de noviembre registran cerca de 1.111.000 viajeros que pasaron por el Silvio Pettirossi. Pretenden cerrar el año con la concurrencia de más de 1.200.000 pasajeros.

En cuanto al flujo de viajeros de manera diaria asegura que se registra un promedio aproximado de 3.800 a 4.200. “Esto irá en aumento y podríamos superar los 5.000 por la temporada alta”, comentó Aguilar.

Vuelvo luego de tres años. Lo que más extraño de Paraguay es a los familiares y la comida típica. Giuliana Macen. residente en Suiza.

Vuelven a ver a su madre luego de 48 meses
Con un colorido ramo de flores, Sabrina Romero (14) y su hermano Andrés Romero (10) aguardaban ansiosos la llega de su madre a quien volvieron a ver luego de cuatro años. Los corazones empezaron a palpitar con mayor intensidad cuando la progenitora, Raquel Romero, se acercó a ellos.
El deseo de ofrecer un futuro mejor a los hijos obligó a la mujer a ir a trabajar a España. Los niños quedaron bajo el cuidado de los abuelos, en Atyrá. “Mi intención es ir un tiempo a España y luego volver porque es muy difícil estar en un país ajeno y, sobre todo, lejos de los chicos”, expresó.

Tras volver de Alemania, se dan el esperado abrazo
Luego de un año y nueve meses de intenso estudio y alejada de los familiares, Nadir Gehrmann Caballero logra encontrarse con sus padres y tío, quienes fueron hasta el aeropuerto internacional Silvio Pettirossi para recibirla ayer.
"¡Qué linda estás, mi hija!”, exclama entre llantos la madre y vuelve a darle otro profundo abrazo que deseaba hacerlo desde hace tiempo. Nadir reside en Alemania, donde realiza un posgrado en Sicología. Aprovechando el receso académico volvió a tierra guaraní, por un mes, para pasar la Navidad y el Año Nuevo rodeada de sus seres queridos.