El mayor problema en el suministro de energía de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) se encuentra en el sistema de distribución puesto que, de un total de 455 cables alimentadores (las líneas de 23.000 voltios que salen de las subestaciones), solo 151 tienen conductores protegidos y el resto siguen siendo tendidos con conductores desnudos, según informaron autoridades de la estatal. Las líneas desnudas, al ser más frágiles, tienden a desenergizarse ante tormentas, fuertes vientos o sufren cortocircuitos por el contacto con las ramas.
Ayer, Víctor Romero, presidente de la estatal se reunió con Mario Ferreiro, intendente de Asunción, y posteriormente comunicó que el próximo año se iniciará un plan más intenso para la sustitución de los cables desnudos en el área metropolitana. Para el efecto, el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) otorga un préstamo de USD 150 millones, de los cuales USD 124 millones serán utilizados para estos trabajos.
Se aguarda el dictamen de la Contraloría General de la República (CGR) y luego se remitirá al Congreso para su aprobación, precisó Romero.
GRADUAL. Fabián Cáceres, gerente de Planificación de la empresa pública, manifestó que esta será la primera etapa de los trabajos y comprende los centros de distribución de Puerto Sajonia, San Lorenzo, Puerto Botánico, Tres Bocas, Luque y Lambaré. A más de los cambios de cables aéreos, las acometidas (los tendidos que llegan a las casas) van a tener cables preensamblados, apuntó el ingeniero.
Asimismo, se iniciaron otras gestiones con la CAF, para un crédito de USD 150 millones; y con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) para un préstamo de USD 100 millones. De esos recursos, USD 120 millones serán utilizados para la fase 2 del proyecto, que comprenderá los centros de distribución de Gral. Díaz, Parque Caballero, Republicano, San Miguel, Villa Aurelia, Viñas Cué, Capiatá, Guarambaré, Limpio, San Antonio, La Victoria, Itauguá, Caacupé, Villeta y Ciudad Nueva.
“Allí tendríamos el 100% de sustitución en Asunción, área metropolitana y ciudades vecinas. Estos alimentadores desnudos representan un problema para la distribución. Cada vez que llueve, que tenemos vientos o ramas que tocan nuestras líneas se desenergizan los alimentadores, que son las líneas de 23.000 voltios que alimentan los transformadores que están en los barrios”, comentó.
Solo en el área metropolitana, la ANDE cuenta con 220 alimentadores, de los cuales 87 son cables aislados protegidos (el 40%) y 133 aún son desnudos, detalló Cáceres.
Consultado sobre la posibilidad de realizar cableado subterráneo, el gerente señaló que colocar un cable protegido cuesta 5 veces más que un desnudo y hacer subterráneo costaría 10 veces más. Con las actuales tarifas, hacer inversiones para ese trabajo es imposible, concluyó.
