Schaerer aseguró que tanto Lohrmann como Maidana tienen cuentas pendientes en el Paraguay, independientemente del secuestro de su hijo. “Además, tengo expectativas de que cuenten las cosas que saben de Christian”, indicó y añadió que espera que “encuentren pronto” a su hijo.
Mencionó que toda su familia mantiene la esperanza de que siga vivo, luego de 14 años de sobrellevar esta situación que “alimenta la ansiedad” de conocer el paradero de Christian. “Y sabemos que Lohrmann lo sabe perfectamente bien”, dijo el papá en contacto con el mencionado programa.
“El pedido de extradición de Paraguay es algo que yo espero que se haga pronto, porque Lohrmann y Maidana tienen pedido de captura internacional por la Justicia paraguaya”, expresó.
Recordó que ambos, además, están involucrados en los casos de secuestro de María Mercedes Elizeche y Mariángela Martínez, motivo por el cual “el Paraguay tiene derecho” de tramitar rápidamente la extradición de los detenidos, “por haber dictado la captura” al momento en que se registraron estos casos.
“Fue un shock emocional todo esto, lo esperamos desde hace 14 años… seguimos cada pista, cada chisme, no tengo más que palabras de agradecimiento hacia todos los que nos ayudaron”, afirmó Juan Pedro Schaerer en otro contacto con el programa Señales, de Germán Martínez Vierci, en radio Monumental AM.
Aseguró que el detenido fue quien dispuso finalmente de su hijo, que nunca apareció a pesar de que la familia pagó más de 250.000 dólares en aquel momento, tras el secuestro registrado el 21 de setiembre del 2003.
Dijo que serán fundamentales las relaciones diplomáticas para que Lohrmann sea extraditado. La Cancillería argentina pondría en marcha todos los trámites desde el lunes, mencionó.
Juan Pedro Schaerer se radicó en Paraguay en el año 1999 y se naturalizó paraguayo.
Rodolfo José Lohrmann –el Ruso o la Rubia – y José Horacio Potrillo Maidana, sindicados por el secuestro y desaparición de Christian Schaerer, y el segundo vinculado al secuestro del ganadero Sebastián Llano, fueron detenidos el viernes en la localidad de Aveiro, Portugal, tras 14 años de estar prófugos de la Justicia de los países de Paraguay, Argentina y Brasil.