Nelson Acosta - Reuters
Castro, que abandonará la presidencia el 19 de abril, encabezó una reunión del Comité Central del Partido Comunista, que examinó “qué había salido bien, qué se debía rectificar y qué cuestiones obstaculizan la implementación de las medidas”, reportó este martes el diario Granma.
Castro, de 86 años, continuaría hasta 2021 como jefe del gobernante Partido Comunista, la fuerza política rectora del país.
“A pesar de los errores e insuficiencias reconocidas en este Pleno, la situación es más favorable que hace algunos años”, dijo Castro.
Las reformas se implementaron rápidamente en los tres primeros años tras el congreso del Partido Comunista en que se acordaron, en 2011, pero su desarrollo “se redujo por la complejidad de las medidas y también a causa de errores en la planificación de los procesos y en su control”, dijo el jefe del programa de las reformas, el vicepresidente Marino Murillo.
El mandatario cubano, quien reemplazó en el poder a su fallecido hermano Fidel hace una década, emprendió desde el 2010 un programa que incluyó la apertura de pequeños negocios privados y la compraventa de viviendas, entre otras reformas, para tratar de mantener el socialismo en el país.
Actualmente, se están revisando las medidas y entre las prioridades está el ordenamiento monetario, en particular los estudios para una unificación monetaria y cambiaria.
En Cuba circulan el peso (CUP), moneda en la cual se pagan la mayoría de los salarios, y el peso convertible (CUC), usado en el turismo y para los productos importados. El gobierno sostiene que la convivencia de ambas obstaculiza el control económico.