Esta firma fue la que concretó una alianza estratégica de inversión con la Asociación Nacional de Navegación y Puertos (ANNP), dueña del predio y del vetusto puerto que fue reacondicionado para recibir, en una primera etapa, un millón de toneladas de soja de la zona de Mato Grosso do Sul de Brasil.
Consideró una postura realmente difícil de entender la del sector que se está movilizando. “Los brasileños nos están brindando, luego de años de negociaciones, un tanto por ciento de su carga que bien podrían mover por otro corredor”, enfatizó.
Recientemente, un sector de camioneros agremiados inició una movilización con bloqueo de rutas en protesta contra el ingreso de camiones bitrenes brasileños, que van a operar con carga de soja en el nuevo corredor hasta el puerto.
Sesto explicó que básicamente la empresa llegó a Paraguay en el 2013 y operó como empresa naviera, área donde invirtió en la construcción de 72 barcazas en astilleros locales.
Agregó que a raíz de la caída del precio de commodities, como el mineral de hierro en el 2014, se redujeron considerablemente los volúmenes de carga en la hidrovía, razón por la cual tuvieron que buscar opciones de inversión. Dijo que vieron qué pasaba en Brasil y Argentina, donde principalmente este último requería de más soja como segundo productor mundial de aceite de esta materia prima. “Vimos que Argentina podía consumir 15 millones para producir aceite, pero no tenía esa soja y su reserva no cubría ni el 30% de lo que necesitaba. Vimos que Paraguay provee una parte, pero también que otra podría salir del norte de Brasil, de la zona de Mato Grosso y Mato Grosso del Sur y que se podía hacer a través del puerto de Concepción por ser la logística más viable”, recalcó.
Añadió que luego empezaron las conversaciones con productores de aceite de Argentina, los de soja del Brasil y autoridades. “Tratamos de entender cómo se podría reactivar el puerto de Concepción y vimos que la ANNP tiene un sistema de alianza estratégica operacional con inversión de capital”, recalcó.
ABANDONO. El directivo de Baden SA señaló que el puerto concepcionero estaba en estado de abandono. Se firmó un contrato de explotación por 20 años, extendible por diez años más, y se realizó una inversión de ocho millones de dólares en reacondicionamiento y equipamiento para operar a una capacidad de cuatrocientas toneladas por hora de embarque de barcazas, con dos volcadoras automáticas. Sesto estimó que las operaciones arrancarán en la segunda quincena de febrero, la mayor parte con soja brasileña y otra área de combustibles, para luego ir transformando la zona para cargas generales de fertilizantes y contenedores.
Precisó que la ANNP percibirá un porcentaje de canon de todos los servicios facturados en el puerto y no sobre utilidades.
Consultado sobre el conflicto por el ingreso de bitrenes desde el Brasil, apuntó que no se están manejando informaciones correctas sobre este caso. Apuntó que Brasil bien podría seguir como hace cuarenta años sacando su soja por Paranaguá, pero ahora ve también la posibilidad de generar un nuevo corredor. “Mato Grosso está tratando de ayudarnos a abrir ese corredor a través de Concepción porque entiende que es una alternativa más y se ha logrado la confianza”, subrayó.
Fruto de un largo proceso
El puerto de Concepción, que arrancará actividades en breve, surgió de un proceso de tres años de estudios y conversaciones con autoridades locales y de países vecinos, y brindará muchas oportunidades para la economía de la zona y del país, manifestó a ÚH el director de Baden SA, Fabián Sesto.
Insistió en que hubo un proceso de generación de confianza entre los dos países para activar este corredor del Norte y que eventualmente se podría perder poniendo en riesgo las inversiones y las oportunidades.
Destacó que hay muchas posibilidades de ir generando oportunidades de negocios y movimiento económico en este corredor, como la producción de cal agraria y otros productos para el Brasil. “Esto empieza a generar oportunidades que sabés dónde empieza, pero no sabés hasta dónde van a llegar”, recalcó.
