El incendio que se produjo el pasado viernes en la estación de la ANDE de Lambaré dejó a miles de usuarios sin el servicio de energía eléctrica. Como consecuencia, muchos hogares también quedaron sin agua.
Víctor Romero, presidente del ente, señaló que se logró reponer el servicio al 100% de los usuarios tras arduos trabajos realizados el fin de semana. Detalló que el 70% se logró restablecer mediante la instalación de equipos nuevos y el otro 30% por medios de otros centros de distribución.
Pero habló sobre la necesidad de contar con más cantidad subestaciones para evitar la sobrecarga de una estación principal.
En ese sentido, recordó que entre los años 2001 y 2002 se le impidió a la institución la construcción de dos subestaciones en Asunción, lo que iba a servir para descomprimir la carga de otras estaciones.
“Ante esa imposibilidad de construir, nos vimos obligados a ampliar el local de Lambaré. Todo eso produce sobrecarga y un mayor deterioro de los componentes”, indicó en conferencia de prensa.
Pidió mayor conciencia a la ciudadanía porque, en caso contrario, la demanda de energía resulta más difícil de atender.
El titular del ente lamentó que actualmente exista otra corriente de oposición a la construcción de obras de infraestructura en el Área Metropolitana de Asunción y Ciudad del Este, departamento de Alto Paraná.
Si bien entiende el recelo de la gente ante la instalación de los equipos eléctricos, Romero expresó que no son ninguna institución irresponsable que provocará daño a la salud de las personas.
“Paraguay no es el único país que usa subestación, no existe otra manera de trasmitir la energía eléctrica que no sea cable. En todas las ciudades del mundo existen subestaciones”, afirmó.
Sostuvo que lo ideal en cualquier sistema eléctrico es la existencia de una mayor cantidad de subestaciones y no una de grandes envergaduras como la de Lambaré porque, ante problemas, se hace más complicada la transferencia de la energía a otros centros de distribución.
Hasta el momento no se puede determinar las pérdidas que ocasionó el siniestro del pasado viernes, pero Romero adelantó que es grande en relación con la energía eléctrica no facturada y por la mano de obra.
Sobre los equipos, dijo que no se tendrá mayores pérdidas porque son componentes que estaban por reemplazarse debido a su antigüedad.