Santiago Manchini se defendió de las acusaciones contra su local comercial este viernes luego de que la comuna de la capital lo haya clausurado, tras una intervención por supuesta insalubridad. La Fiscalía no descarta la posibilidad de concretar una imputación contra los propietarios del negocio.
El empresario dijo que en ningún momento encontraron roedores ni insectos, sí goteras, grasa por la pared, rajaduras, entre otras deficiencias, las cuales aceptó y que consideró como un grave error.
“Admitimos las falencias, pero estamos en proceso de corregir las mismas”, remarcó en contacto con radio La Unión. Desmintió que con tales deficiencias esté arriesgando la salud de sus clientes, debido a que siempre cuidaron la calidad de sus productos, sostuvo.
“El pasado 22 de noviembre tuvimos una intervención de la Municipalidad de Asunción y se observó un montón de deficiencias, goteras, rajaduras de las paredes y manchas de grasa pesada de las paredes, entre otras cuestiones. El día 30 recibimos otra intervención multitudinaria con la orden de clausura, es decir, ahora estamos clausurados”, dijo.
Agregó que tal vez el conflicto se dé porque la casa es vieja y tiene problemas con la canaleta, pero que jamás arriesgaron la salud de sus clientes, dijo nuevamente.
La fiscala Silvia Otazú es quien lleva el caso. Intervino el negocio gastronómico en compañía de una comitiva compuesta por integrantes de la Policía Nacional, la Secretaría de Defensa al Consumidor (Sedeco), y el Instituto Nacional de Alimentación y Normas (INAN).
“Recibimos denuncias de la Municipalidad de Asunción y del INAN con relación a la manipulación de alimentos, además de la producción y comercialización”, señaló en aquel momento Otazú en contacto con la prensa.