Se trata de Justo Martínez Florentín, quien fue condenado a 27 años de pena privativa de libertad por homicidio doloso en grado de tentativa, coacción sexual y violación consumada.
Fue el fiscal de Paraguarí, Guillermo Ortega, quien logró demostrar en juicio oral la culpabilidad del hombre en el hecho denunciado por una mujer.
El hecho
Todo sucedió luego de una fiesta, según los antecedentes del caso, cunado Martínez Florentín sacó un arma blanca y llevó a la mujer hasta un terreno baldío en donde le propinó golpes de puño y abusó sexualmente de ella, confirmó el Ministerio Público.
Luego de una serie de golpes, el hombre logró abusar sexualmente de la mujer y, además, le aplicó estocadas en varias partes del cuerpo, causándole heridas de gravedad hasta que, al darse cuenta de lo que hizo, huyó del sitio.
La víctima volvió a la fiesta y pidió ayuda en el lugar. En tal momento le llevaron al Hospital Regional de Paraguarí y luego al Hospital del Trauma para que sea asistida.
Según el fiscal, los agravantes fueron: “el ensañamiento debido al sufrimiento de la víctima; el padecimiento innecesario por la ejecución del crimen, el aumento deliberado e inhumano del dolor de la víctima, la crueldad previa a la producción de la muerte”.
El Tribunal de Sentencia de Paraguarí estuvo presidido por el juez Hugo Ríos Alcaraz e integrado por los miembros titulares, magistrados Jorge Giménez y Gerardo Ruiz Díaz, informaron.