EFE
“Alberto era el mismo de siempre con una tensión creo que propia de la denuncia que había hecho”, expresó el informático en una entrevista telefónica con radio Rock & Pop.
“El único momento que yo le vi quebrado fue el momento que me dijo lo de las hijas, pero lamentablemente no se puede probar”, confesó sobre Nisman, quien falleció hace más de un año y la investigación de su muerte no ha determinado todavía si se trató de un suicidio o de un homicidio.
Lagomarsino detalló que el fiscal estaba preocupado por si iba con sus hijas “y un loquillo hijo de puta aparecía con un palo y le decía traidor y le empezaba a pegar”.
“No sabes lo que es que tus hijas no quieran estar con vos por miedo a que les pase algo”, aseveró que le dijo.
Nisman fue encontrado con un tiro en la cabeza en su casa de Buenos Aires el 18 de enero de 2015, días después de haber denunciado a la entonces presidenta, Cristina Fernández, por presunto encubrimiento de los iraníes sospechosos del atentado contra la mutua judía AMIA en 1994 y pocas horas antes de explicar ante el Congreso el contenido de esa denuncia, posteriormente desestimada.
El fiscal basaba su denuncia en el acuerdo de entendimiento suscrito entre Argentina e Irán en 2013 y que, según él, implicaba encubrir a los sospechosos a cambio de impulsar el intercambio comercial de granos argentinos por petróleo iraní.
El informático sostiene desde que fue hallado muerto el fiscal, con quien colaboraba profesionalmente, que este le recibió en su domicilio el sábado 17 para que le entregara el arma calibre 22 para proteger a sus hijas, pero que le aseguró que no la iba a usar.
En la entrevista de hoy, Lagomarsino afirmó no saber si fue el último que vio con vida al procurador, quien en su opinión tenía “momentos de mucha excitación y momentos de tranquilidad”.
Además, criticó a la ex esposa de Nisman, Sandra Arroyo, con la que dijo que a pesar de que tenía “más confianza” que con Alberto, ha dicho cosas que son “totalmente mentira”.
“Yo hablaba temas con Sandra que no hablaba con Alberto. Sandra tiene o tenía, hace un año y pico que no la veo, una forma de ser distinta a Alberto. Yo confiaba mucho en ella. Pero dijo cosas que son totalmente mentira. En la causa están de una manera y ella dice que son de otra”, recriminó el informático.
Hasta ahora, en la causa por el fallecimiento solo están imputados Lagomarsino, por prestarle el arma que acabó con su vida, y los escoltas que debían custodiarlo, acusados de incumplimiento de los deberes de funcionario.
“Las cosas que dijeron de mí, las cosas que dijeron de Alberto... no sé si fue tratado de forma profesional... me parece a mí", reprochó.
En concreto, recordó que se “dijeron un montón de cosas” como que “había una relación íntima” entre ambos.
“Pero eso queda en el aire y nadie sale a desmentirlo. Lo que pasa que a mí no me gustan los medios y no salgo todo el tiempo a decir las cosas”, agregó.
Lagomarsino reconoció que está “tratando de volver un poco a la normalidad”, lo cual consideró “es muy difícil”.
“Creo que nunca va a volver. La gente no lo entiende, pero estar con tres tipos que te siguen con la camioneta de noche...”, lamentó, respecto a los custodios que le acompañan.
“Me voy a trabajar y me siguen, me voy al gimnasio y me siguen... Todo el tiempo están conmigo”, matizó.
La ex fiscal argentina que investigaba la muerte de Alberto Nisman, Viviana Fein, señaló ayer que cree que el procurador “se vio obligado” a suicidarse porque “lo instigaron o lo indujeron” y apoyó su teoría en llamativos cruces telefónicos de ex agentes de inteligencia y de las Fuerzas Armadas.
La causa cambió de tribunal en marzo pasado al pasar al fuero judicial federal, que tiene mayores competencias, algo que reclamaba la familia del procurador, que se inclina por la teoría del homicidio y siempre se mostró muy crítica con la actuación de Fein y de la jueza de instrucción.