CAAGUAZÚ
Un testigo de 13 años de la muerte de Carolina Marín, la criadita de 14 años asesinada a golpes en Vaquería, declaró ayer en cámara Gesell que la tutora de la niña, Ramona Melgarejo, fue quien le propinó fuertes golpes en la espalda con un pedazo de madera. Melgarejo y su esposo, Tomás Ferreira, están presos e imputados por homicidio doloso.
La declaración se desarrolló en la ciudad de Caaguazú como anticipo jurisdiccional de pruebas con participación de todas las partes del proceso. El testigo contó que Melgarejo golpeó a Carolina, luego de que Ferreira la haya dado varios puñetazos en la cara.
El niño se desempeñaba como ayudante albañil en circunstancias del fatídico acontecimiento ocurrido el pasado 20 de enero. Según distintos testimonios, Ferreira comenzó a golpear a Carolina supuestamente después de haberla encontrado con un albañil que trabajaba en la casa.
Para los fiscales del caso, las declaraciones recolectadas aportaron elementos incriminatorios en contra de la pareja Ferreira-Melgarejo en el homicidio de la niña.
Por otro Juan Ramírez Khon, abogado defensor de Ramona Melgarejo, aseguró que durante su declaración el testigo entró en varias contradicciones que serán expuestas en su debido momento.
Argumentó que existen varias presiones contra su cliente debido a que la misma ejerce la función de encargada del Registro Civil de las Personas en la ciudad de Vaquería. “Muchos son los que quieren su cargo”, aseguró.
“CON UNA RAMA”. La declaración testimonial del mismo testigo ante el Ministerio Público, en compañía de su madre, fue la base de la imputación en contra de Melgarejo por homicidio, quien también está procesada por violencia familiar y violación del deber del cuidado.
“Vi que el señor Tomás debajo del mango golpeó con la palma de su mano en la cara a la joven Carolina, la golpeó varias veces, 6 a 7 veces”, relató el testigo, quien precisó que la niña incluso cayó al piso y se golpeó la espalda con una plantera por su notoria debilidad.
“Luego la llevó hacia la casa principal ubicada hacia el frente del domicilio, avisando a doña Ramona lo ocurrido, momento en que la señora Ramona oho ogueru arasa rama ipoguasúva de aproximadamente 2 cm de diámetro que ya estaba seca”, mencionó el trabajador.
También contó haber observado cómo Ramona Melgarejo golpeó varias veces a Carolina en la espalda “hasta llevarla al dormitorio de la joven, donde siguió golpeándole junto con el señor Tomás (Ferreira)”.