“La manera en que se imponen las metas comerciales, si son superiores a las que tenemos en la media del mercado, es factor fundamental; mientras que el entrenamiento comercial es un elemento diferenciador porque la fuerza de venta mejor entrenada es la que determinará el éxito comercial; en tanto que la mejor fuerza en las ventas está asentada en los mismos usuarios de las prendas, ya que son los que sabrán transmitir mejor que otros el beneficio del producto. En cuanto al cliente, las empresas no deben esperar a que aquellos lleguen, sino que deben salir a buscarlos o brindarles más horas para cerrar el contrato. Finalmente, la medición permite funcionar de la mejor manera el negocio, porque ayuda a apretar algunas tuercas para que el sistema trabaje mejor”, dijo el experto.
Estos cinco principios fueron expuestos por el especialista en su disertación sobre alto rendimiento en ventas. El expositor asesora a cinco empresas nacionales y es director de Inversiones Andes, además de brindar referencias sobre estrategias para el crecimiento de compañías en Paraguay.
Un abordaje transversal a la industria en general también fue contemplado por Contreras, al exponer experiencias en el sector de las confecciones como la de la empresa Cintas o la compañía J&K Services, que también puede ser aplicado a otros rubros.
Con respecto a los elementos fundamentales y los pilares para obtener buenos resultados en el segmento de la confección y la moda, destacó que si bien muchos teóricos apuntan al márketing y la producción, es el cliente también una de las patas que sostienen el negocio. “Debo venderle algo a alguien, con eso respetamos ciertos principios; un producto sin un cliente es un exceso de inventario; los diseños pueden ser muy bonitos, pero debo venderselo a alguien”, destacó respecto de la preponderancia de tener en cuenta al cliente.