02 may. 2025

Mako llega a Itapúa, donde residen más inmigrantes japoneses

Por Raúl Cortese

Recibimiento. Matsumiya Shizuo, el poblador más antiguo de Federico Chávez, da  la bienvenida a la princesa Mako.

Recibimiento. Matsumiya Shizuo, el poblador más antiguo de Federico Chávez, da la bienvenida a la princesa Mako.

FEDERICO CHAVEZ-LA PAZ

La nieta del emperador del Japón, Akihito, princesa Mako, inició ayer su serie de visitas a colectividades japonesas residentes en Itapúa, con una vuelta por Federico Chávez, distrito de Capitán Miranda, a unos 20 kilómetros de la ciudad de Encarnación, sobre la ruta Graneros del Sur.

Fue recibida por el actual intendente de la localidad, Basilio Gura. En el edificio de la Asociación Japonesa del lugar, visitó el colegio y honró a los inmigrantes en el monumento que se encuentra en el lugar. Después se desplazó al salón de actos en donde recibió el saludo de los primeros inmigrantes que llegaron a Itapúa, en el año 1952, las primeras 34 familias de Federico Chávez. Estos primeros colonos estrecharon la mano de la princesa y dialogaron brevemente con ella.

Tras este evento, Mako se trasladó a la Asociación Japonesa de La Paz, distrito hoy gobernado por una mujer paraguaya, Blanca Chávez. Luego fue a la Cooperativa La Paz, en donde se mostró muy interesada por los productos agrícolas que allí se producen. Todos los movimientos dados por la princesa se materializan bajo un estricto cumplimiento del protocolo, siendo extremadamente puntuales con el cumplimiento del horario en todos sus aspectos. Varios periodistas llegados de Japón también acompañan su visita.

“GRAN RESPETO Y HONOR”. Matsumiya Shizuo es considerado el poblador japonés más antiguo de Federico Chávez, la primera colonia japonesa que se formara en Itapúa, y fue designado por el protocolo para ser el primero en saludar a la princesa Mako, ayer en el salón de actos de la Asociación Japonesa del lugar. “Para nosotros es un gran honor y un gran respeto saludar a la princesa Mako, representa el origen o la raíz de todos los japoneses”, explicaba, a través de la traductora Tie Detamara.

Este hombre, curtido por los años, la tierra colorada y muchos ciclos de sacrificio en montes considerados vírgenes en la época, es parte del cuarto grupo que llegó a la localidad de Federico Chávez, en el año 1955, desde la Prefectura de Wakayama, de la ciudad de Iwaka, teniendo unos 24 años cuando llegó al Paraguay, desde su pueblo con su familia.

“Mi madre fue quien nos inculcó los conocimientos de la agricultura en algo que para nosotros era todo nuevo, veníamos de la costa del mar, con escaso conocimiento sobre la agricultura, sabíamos de Paraguay que era un país con mucha tierra y plano sin salida al mar, solo teníamos esa información”, explicó. Agregó que sabían alguna información de la Guerra de la Triple Alianza como conocimiento agregado, en la actualidad es bisabuelo, tiene 86 años y convive con el resto de los descendientes como el más antiguo de la comunidad de Federico Chávez.

En el acto principal en Encarnación Mako elogió a la ciudad por su belleza y dijo que espera con ansias visitar las Reducciones Jesuíticas de Trinidad donde estará hoy. Tras ser declarada ciudadana ilustre, compartió una cena con el gobernador de Itapúa, el presidente de la Junta departamental de Héctor Brunaga y el intendente Luis Yd.