EFE.
La respuesta de Maduro se produce tres días después de las palabras de Trump, y luego de que todo el chavismo gobernante y buena parte de la comunidad internacional rechazara la posibilidad de una intervención en Venezuela.
“Este pueblo está decidido a enfrentar a los extremistas, supremacistas y racistas de Estados Unidos; y derrotarlos con el coraje, valentía, y fuerza que nos hace ser orgullosos de ser venezolanos”, dijo Maduro durante un encendido discurso frente a miles de chavistas que le aplaudían.
La denominada “marcha antiimperialista” convocada por el Gobierno recorrió varias calles del oeste de Caracas y llegó hasta las cercanías del palacio presidencial de Miraflores, donde se instaló una tarima con un mensaje escrito en letras gigantes: “Fuera Trump de América Latina”.
Desde allí, Maduro tildó de “desproporcionadas, altisonantes y groseras” las advertencias del presidente estadounidense y aseguró que el pueblo venezolano “no lo intimida ni lo derrota nadie”.
En este sentido, agradeció a los “Gobiernos y líderes” del mundo que, aseguró, le han expresado su repudio a la posibilidad de hacer una operación militar en el país caribeño.
El líder chavista cree que la Administración de Trump tomó esta posición respecto a Caracas debido a la “derrota” de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en su intento por deponerlo del poder en los últimos meses, cuando una oleada de protestas sacudió Venezuela y se saldó con más de 120 muertos.
Por ello insistió en su solicitud de conversar telefónicamente con el líder republicano para decirle que la oposición venezolana lo está “robando” y “engañando”, ya que el antichavismo -que denuncia la existencia de una “dictadura” en el país- inscribió candidatos para la elección de gobernadores, previstas para octubre.