“Quieren eliminarme del juego político”, manifestó el ex mandatario este jueves a la par de rechazar el fallo de la justicia que le condenó a nueve años y medio de pena por presunta corrupción.
El brasileño no está de acuerdo con la sentencia del juez Sergio Moro, para él, se trata de una jugada política que le impida volver a candidatarse en las próximas elecciones.
Sus abogados apelarán el fallo que, para ser firme, debe ser aún ratificado en segunda instancia, informó el portal RT Noticias.
Lo mismo había asegurado más temprano el ex presidente de la República del Paraguaya, Fernando Lugo, quien consideró también el fallo como una decisión parcial con tinte político debido al arrastre que tiene Da Silva en su país.