A poco menos de un mes de las elecciones internas, dicha alianza no se rompió y esto quedó más que evidenciado el miércoles y jueves pasados, primero en la Cámara de Diputados y posteriormente en la Cámara de Senadores.
Los liberales llanistas encabezados por Édgar Ortiz, junto a María Carísimo, Ramona Mendoza, Pedro Duré, Gustavo Cardozo y Enrique Mineur, al igual que los liderados por Juan Bartolomé Ancho Ramírez, que conforma su banca con Celso Maldonado, Asa González, Esmérita Sánchez, van constantemente en contra de los dictámenes del Directorio del PLRA o de la decisión que asumen los demás opositores y colorados disidentes.
Lo más reciente se registró en las últimas tres sesiones que tuvo la Cámara Baja, cuando las bancadas opositoras votaron por el aumento a los docentes y los citados liberales decidieron votar en contra, al igual que los colorados cartistas. Misma situación se dio con el aumento de más de 78 mil millones de guaraníes para la contratación por un mes, en plena campaña electoral, de 1.800 funcionarios para el Ministerio de Salud Pública (MSP).
Este tipo de acontecimientos se registraron a lo largo de estos poco más de cuatro años, intensificándose en el 2017, tras la intención del presidente Horacio Cartes de conseguir su reelección. Los llanistas, tanto en el Senado como en Diputados, apoyaron de manera férrea el atropello a la Constitución Nacional por parte del primer mandatario y sus parlamentarios leales.
Ni el hecho de que efectivos de la Policía Nacional irrumpieran en la sede del PLRA sin orden judicial y asesinaran al joven dirigente Rodrigo Quintana o que un diputado (Édgar Acosta) fuera baleado en la cara, también por la policía, evitaron que los “llanistas” y los “anchistas” siguieran acordando con los cartistas.