El especialista aseguró que Paraguay debió haber recibido más recursos por la cesión de energía de la hidroeléctrica al Brasil desde 1985 a 2016, si se consideran cinco escenarios distintos. Añadió que en 31 años, el Producto Interno Burto del Paraguay (PIB) real de nuestro país alcanzó USD 524.000 millones, pero si la energía de Itaipú se cedía a precio de mercado el PIB hubiera alcanzado más de 635.000 millones, por lo que el PIB perdido llega a la suma de USD 111.400 millones. Esto se había logrado gracias al efecto multiplicador que iba a generar el dinero inyectado en la economía nacional.
“Agarré varios precios del mercado. El mayorista, el que aplican las hidroeléctricas brasileñas a largo plazo, la equivalencia en precio de barriles del petróleo, el precio que pagan las industrias de Brasil y el valor residencial. Hice el cruce y recalculé lo que Paraguay recibió y pudo haber recibido si se cedía la energía a uno de esos cinco precios de mercado”, detalló.
Desde 1985 a 2016 Paraguay obtuvo USD 4.300 millones por cesión de energía, pero la cifra pudo haber sido incluso superior a los USD 100.000 millones si se aplicaba el precio del consumo residencial. El precio más bajo, que es del mercado mayorista significaba USD 36.900 millones, indicó.
SALUD Y EDUCACIÓN. Carter manifestó que estas cifras representan mucho para un país pobre como el nuestro, en donde todavía falta invertir mucho en salud y educación.
“Podríamos haber duplicado en todos estos años el gasto en salud pública y educación, y todavía nos sobraban USD 24.000 millones. Íbamos a asfaltar todo el país, en la década del 90 ya íbamos a tener carreteras y puentes por todos lados. Resolvíamos los conflictos agrarios, se compraban las tierras. Por eso me emocionó hacer el estudio, porque realmente duele ver que los hospitales no tienen camas, que gente murió esperando, que las escuelas no tienen techo”, precisó.
Terminar con el subsidio al Brasil en 2023
Miguel Carter enfatizó que, en lugar de solucionar sus problemas sociales y económicos, Paraguay terminó subsidiando a la industria brasileña, sobre todo a la de San Pablo, con la energía cedida de Itaipú. Indicó que en el 2023, cuando se deba renegociar el Anexo C del Tratado de Itaipú con Brasil, estos datos tienen que ser usados por los negociadores nacionales para conseguir las justas reivindicaciones.
“Esto ya no se trata del Partido Colorado o Liberal, de la izquierda o de la derecha; es la dignidad paraguaya la que está en juego. El Tratado de Itaipú fue lesivo para Paraguay, fue un tratado de dictadores. Nuestro país perdió riquezas”, comentó el experto, quien reside actualmente en Guinea - Bissau.