Opositores, disidentes y luguistas habían decidido sancionar al parlamentario oficialista por 60 días sin goce de dieta, tras la filtración de audios que involucran al legislador en el tráfico de influencias en el manejo de la Justicia desde el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM).
El legislador operó desde el JEM, ente que presidía y que se encarga de sancionar y destituir a fiscales y a magistrados, a favor de correligionarios y de sus más cercanos allegados implicados en hechos de corrupción.
Numerosas grabaciones de conversaciones telefónicas filtradas confirman lo que ya se sabía extraoficialmente sobre el esquema de corrupción y el grosero tráfico de influencia que encabezaba el senador cartista Óscar González Daher, como presidente del JEM.
Los audios divulgados por Radio Cardinal salpican, además de González Daher; a varios políticos, ministros de la Corte Suprema de Justicia, jueces, fiscales y abogados.
Las varias grabaciones reveladas dejan al descubierto la rosca corrupta que maneja la Justicia, y la causante de que muchas causas hoy estén cajoneadas.
Un respiro. El miércoles, en sesión extraordinaria, la senadora Desirée Masi propuso despojarle del cargo de senador a Óscar González Daher y, en contrapartida, Juan Carlos Galaverna propuso convocarlo para que se defienda, moción que prosperó, y que se dará en la fecha.
“No se puede culminar un proceso sin darle al senador la oportunidad de ejercer su derecho a la defensa. Sería un contrasentido que para aplicar la suspensión de 60 días se requiera de dos tercios de los presentes y para algo de mayor rango y gravedad baste con la mayoría simple”, había expresado Galaverna, convenciendo a sus colegas.
El miércoles, también se le tomó el juramento como senador a Víctor Paniagua Fretes, suplente de González Daher. Mientras que en el JEM lo reemplazó el senador Eduardo Petta.